El reencuentro de Gael García Bernal y Diego Luna en pantalla, Rudo y Cursi, afrontó ayer su puesta de largo internacional en el XXV Festival de Cine Independiente de Sundance, con el apoyo de sus padrinos Alejandro González Iñárritu, Alfonso Cuarón y Guillermo del Toro.

Los 'Tres Amigos' -como los llaman en su México- producen el filme a través de su compañía Cha Cha Cha y ya han logrado un fulgurante éxito de taquilla en su país. "Tuvimos mucha confianza en la película, porque tiene una vena popular muy poderosa, y aunque tiene ciertos aspectos locales eso no le evita ser universal", reveló González Iñárritu, en pleno rodaje de Biutiful, con Javier Bardem.

Rudo y Cursi narra como tragicomedia la rivalidad de dos hermanos del México rural que dan el salto al Olimpo del fútbol y la seducción que operan sobre ellos fama y dinero. Gael (el Cursi) y Diego (el Rudo) encarnan a dos personajes "de la provincia, pero sin burlarse, con corazón", destacó el director.

La imagen de Gael como as del balón rendido ante las luces de la fama y su salto al estrellato como ídolo de la música norteña han provocado ya las risas de miles de espectadores.