Apenas si tiene cuarenta metros cuadrados y el aforo no supera las treinta personas, pero el Ruido Rosa es de esos locales emblemáticos de la ciudad que va camino de convertirse en clásico. Fundado por dos de los componentes de 091, José Ignacio y Tacho, el pequeño pub de la calle Sol, que celebra hoy su veintiún cumpleaños, abrió sus puertas en 1987.

"Por entonces yo tenía diecisiete años sólo pero estaba siempre por allí", comenta Víctor Lapido, responsable del local actualmente y guitarrista de Lagartija Nick que atiende mientras graban lo nuevo del grupo en Motril. "Me acuerdo de ver por el bar en esa época a Joe Strummer de los Clash con mi hermano y con 091 cuando les produjo el disco Más de cien lobos".

"Aquí siempre han venido muchos músicos pero por la música. Nos importa mucho la música que suena en el Ruido", afirma Víctor, "yo diría que es música especializada. Rock americano de los sesenta y setenta y también muchos grupos actuales pero con un sonido muy concreto. Buena música, en líneas generales".

Buena música como la que sonará esta noche en directo en la sala el Tren con las cuatro bandas invitadas al cumpleaños: Elastic band, Airbag, The Teenagers y Guadalupe Plata. Cuatro bandas sin nada en común, excepto que todos son clientes de Ruido Rosa, y que a pesar de componer un cartel heterogéneo son la combinación perfecta para una fiesta: rock electrónico con la vista puesta en los años setenta, power punk en castellano, música soul para bailar y blues pantanoso para chapotear un poco.

La especial atención que dedican en Ruido Rosa a géneros musicales minoritarios, convierte al bar en punto de encuentro de megalómanos en general y de la mayoría de músicos de la ciudad, además de los que nos visitan en gira. "Ha venido un montón de gente al bar. Recuerdo ver a los de Rage against the Machine cuando tocaron aquí o el otro día, estaba Juan Aguirre de Amaral", comenta Victor Lapido, "es un orgullo que nos visiten músicos famosos pero creo que los músicos vienen precisamente por eso, porque les gusta la música que ponemos".

Mejor preguntarle a los músicos directamente por qué van a Ruido Rosa. Pablo, de Elastic Band, lo tiene claro: "Es un sitio donde se escucha muy buena música. Es donde hemos aprendido a oír buena música".

Alfredo, la voz de The Teenagers, que nos atiende mientras está en la peluquería, tiene una memoria del todo fotográfica de la primera vez que fue al bar: "Me acuerdo que íbamos por allí en el 95 o 96, que estaba la barra al otro lado y nos poníamos siempre al final, que era nuestro sitio favorito. Me acuerdo de una foto que había de Joe Strummer. Me acuerdo de la máquina de videojuegos donde dejábamos los abrigos. Ahora no se parece mucho a cómo era por entonces".

¿Momentos especiales que recuerden a la vera de la barra del Ruido? "Pues yo tendría 14 años o así y fuimos a una fiesta que había organizado el club de fans de 091 y recuerdo que le pedí un autógrafo a Antonio Arias, que era el bajista entonces. Fue cuando sacaron el disco 12 canciones sin piedad. Fue muy amable con nosotros", comenta Pablo de Elastic Band, "también me acuerdo que una vez aparecieron por allí los Posies y también un día, Evan Dando, el de Lemonheads. La verdad es que es un sitio mítico. Una noche también pasó por allí Jhonny Winter y se bebió una botella de güisqui él solo".

Para los malagueños Airbag, de Estepona concretamente, es visita obligada cuando pisan Granada: "Siempre vamos allí. Es un local en el que te encuentras con amigos de otros grupos como Los Planetas o el Grupo de Expertos. Cuando grabamos en Granada es nuestro bar de cabecera sin duda".

Esta noche, otro momento especial para guardar en el álbum de fechas señaladas: las 21 velas de Ruido Rosa sopladas al unísono por cuatro grupos en directo y un montón de amigos.