Maribel Verdú celebra el año nuevo con una nueva nominación a los premios Goya. Esta vez por su papel de madrastra en la película Blancanieves dirigida por Paco Berger. "Esta es mi novena nominación, con ella me convierto en la actriz más nominada a los Goya junto con Victoria Abril", subraya esta interprete, protagonista de la última campaña de rebajas de El Corte Inglés.

"Lo que más ilusión me hace de son las dieciocho nominaciones que ha conseguido Blancanieves, nadie creía en la película, a Pablo le ha costado siete años encontrar financiación y recibir ahora toda esta recompensa es fantástico", reconoce.

Preguntada por si aceptaría algún papel en televisión, Maribel Verdú indica que prefiere trabajos que tengan un principio y un fin. "No me veo siete años interpretando al mismo personaje, ni me apetece enfrentarme al batacazo de mi vida haciendo una serie que luego no tenga éxito", declara

Asimismo, recuerda que de pequeña odiaba a la madrastra del cuento. "De niña odiaba a esa madrastra y ahora la amo, interpretarla es de lo más grande que me ha pasado", confiesa esta actriz, quien si recibe el Goya, espera hacerlo "con una sonrisa de oreja a oreja", y estar "estupendísima".

Preguntada por las otras nominadas en la categoría de mejor actriz, Verdú señala que el nivel "es muy alto". "He visto todos sus trabajos y son todos espectaculares", declara. "Cuando tienes un buen guión, un buen director y un buen personaje las dificultades son las que uno se quiera poner. Siempre hay secuencias más difíciles que otras, yo las califico con estrellas, en las de tres estrellas te mueres de miedo e inseguridad, pero una vez que dicen acción todo es jugar, eso me lo enseñó Coppola, to play es jugar y no sufrir", reconoce.

La actriz que sigue disfrutando de la resaca del éxito tras rodar El laberinto del fauno asegura estar preocupada por si llega un "batacazo monumental". "He tenido la suerte de enlazar un buen proyecto con otro pero no ha sido más que fortuna, he tenido la suerte de que pensaran en mí y me llamaran para trabajar en esos proyectos. Ahora ya se acabó, han sido los últimos coletazos del cine, a partir de ahora ya se para todo", destaca.

En este sentido, subraya el parón que vive el cine español en estos momentos cine pasa por un mal momento. "Este año se estrenará "Quince años y un día", la película que rodé el año pasado con Gracia Querejeta y tiene otro proyecto en el que espero volver a trabajar con ella pero no sé si finalmente saldrá adelante; ahora los proyectos que tengo a la vista son todos de teatro; en septiembre estrenaré Los hijos de Kennedy dirigida por Jose María Pou", anuncia.

En esta misma línea, advierte de las repercusiones del IVA sobre la Cultura. "Perder la cultura de nuestro país es lo último que nos falta, yo espero que se echen marcha atrás porque en algún momento se tendrán que dar cuenta de que es un perjuicio para ellos, formamos parte de la economía del país", concluye.