Lo vimos el lunes acompañando a Fernando Pardo (Sex Museum, Los Coronas, Corizonas) y el martes haciendo lo propio junto a un Jorge Martí (La Habitación Roja) algo menos dicharachero su predecesor. En ambos casos ya Díez dejó constancia de su capacidad comunicativa, de su pasión por el pop y de esa discutible sentencia, casi discutible, que dice que si hay algo mejor que la música es hablar de música.

Desde luego Álex Cooper siempre ha sido de los tipos más apasionados a la hora de hacerlo. Y en la presentación en Granada a su contribución a la colección Mis Documentos, de la editorial Chelsea que dirige, no iba a ser menos. Desde luego que está resultando sabroso el ciclo Músicos y Libros que se ha programado en la actual edición de la Feria del Libro de Granada. En su caso además, como ya hiciera el día anterior Jorge Martí, ilustró sus comentarios sobre el libro con algunas interpretaciones a la acústica de temas importantes en su vida, y ya fuera rescatando alguna de sus primeras composiciones para Los Flechazos, versionando a Paul Weller (con quién dijo haber sido injusta e incompresiblemente comparado -"Para algunos los mods somos como los chinos; a todos nos ven iguales"-) o en la maravillosa interpretación que hizo de My Aim Is True de Elvis Costello (con quien dijo que sí le encantaría que le hubieran comparado), mostró el gran talento que atesora con una guitarra entre las manos.

En cuanto al libro, como era de esperar por la metodología que ya había puesto en práctica con los de otros autores a los que hizo un encargo similar, se trataba de un compendio de reflexiones, colaboraciones periodísticas, recuerdos, postales, bocetos e ideas que no llegaron a convertirse en canciones, que todas juntos venían a ser las confesiones de enamorado de la moda juvenil, y en su caso de la moda de otro tiempo que venía de otro lugar, otra crónica iniciática. Interminables listas de discos favoritos, recuerdos indelebles de juventud, héroes y villanos que modifican sus perfiles con el tiempo, la vida en la carretera, la militancia en la serie b, triunfos y claudicaciones, sueños rotos y otros alcanzados…

Una vida entera consagrada el pop contada por un fan genuino que es consciente de que el revival puede ser honesto, excitante y hasta moderno.