Antes de entrar en la rueda de prensa Rosa López se encuentra en los pasillos del Ayuntamiento con una señora en silla de ruedas. Se detiene a darle dos besos y la admiradora se fija en uno de sus anillos. Ni corta ni perezosa se lo saca del dedo y se lo regala. Es sólo un detalle de cómo es la cantante granadina que el sábado actúa en el Palacio de Congresos para presentar su nuevo disco. Vestida de negro, esbelta y con el pelo recogido en un moño, revolucionó el Consistorio con su presencia y sus chascarrillos. "Sonríe Rosa", le pidió un fotógrafo. "Es que salen arrugas", respondió la artista a la que, fuera de cámara, no hay que pedirle una sonrisa porque continuamente está regalando bromas y risas.

El concierto será un recorrido musical por los once años de trayectoria profesional de la cantante granadina tras salir de la academia de Operación Triunfo, por lo que incluirá tanto canciones del pasado como algunas de Rosa López, que fue número uno en descargas digitales a las pocas horas de ponerse a la venta con su versión de Yo no soy esa, de Mari Trini, además de una compuesta por ella: Amor amargo. "En Granada tengo lo más bonito de vida, actuar aquí me ilusiona aunque también me ataca", dijo la cantante, que estuvo acompañada por el concejal de Cultura, Juan García Montero, y por su manager desde hace dos años, Pedro Cervera, el responsable de los éxitos del Dúo Dinámico. Rosa recalcó que atraviesa una etapa "muy especial en su vida pese a los tiempos que corren".

"Creo que los sueños se cumplen con esfuerzo. Milagros no hay. Sin esfuerzo no hay milagros", aseguró la artista para quien todo se logra cuando hay "esfuerzo, motivación, ilusión y verdad". En su opinión, "los artistas deben lanzar un mensaje de positividad y fuerza". Por eso comenzará el concierto del sábado con la canción Desde la oscuridad, que habla de que uno "no está solo y de que hay que luchar y ser fuerte". "Es una canción que para mí significó mucho y que para un país entero fue una gracia", recordó Rosa, que se equivocó al cantar en el programa televisivo y pensó que se iba a volver para su casa. Pero al final acabó ganando, igual que hizo en Mira quién baila. Por eso aseguró que "sin esfuerzo, no hay milagros y que si te regalan algo se paga por otro lado con creces".

Por su parte, Pedro Cervera dijo que para el equipo que trabaja con Rosa es "una motivación especial descubrir día a día lo que hay detrás de esta gran artista y persona".

Y Rosa, por su parte, a punto estuvo de cantar a capella en el salón de actos del Ayuntamiento ante las peticiones de los fans, aunque al final consiguió salir de la encerrona con buen humor y una sonrisa. Pero sí podrán escucharla en el concierto del sábado, que será "sencillo y elegante" y que está ideado para que "todo el mundo, sea de la edad que sea, se lo pase bien".