La vida en la ciudad es un bullicio de gente que viene y que va, con la prisa de ir y venir, pero si se mira al subsuelo, bajo los pies de los viandantes, sigue habiendo el mismo bullicio de gente que vive con prisa, que corre hacia todos lados y que no se para ni un segundo.Esto es lo que quiere mostrar Titali Paez, alumna de la Escuela de Arte de Granada, con su exposición de fotografía Agujero Metrópolis, una mirada al Metro de Madrid, al interior de la ciudad, a cómo la gente sigue con la vida bajo el suelo. "Quería representar con la fotografía lo que pasa en el metro, la desconexión que supone del mundo de arriba, pero aún así nunca dejan la prisa a un lado", apunta Titali Paez.

La fotógrafa presentó también el pasado día 10 de septiembre, junto con el resto de sus compañeros, el proyecto de fin de ciclo Arte y oficio, diseños para el milenio en el Parque de las Ciencias , que estará abierta hasta el próximo 9 de octubre. La artista expuso anteriormente en Granada su muestra Cáncer y vida, que se organizó en colaboración con el Ayuntamiento de Churriana de la Vega y la Fundación Cáncer y Vida de Maracena, que lanzaba un mensaje de esperanza, y que actualmente se encuentra expuesta en Jaén.

La muestra se compone de 36 fotografías que ofrecen la visión según Titali de un submundo en el que parece que "atravesamos un campo de fuerza y entramos en otra dimensión, como si el caos organizado invadiera los sentidos", afirma la autora. Una visión oscura, con un conjunto de fotografías en blanco y negro y que muestran el bullicio de los andenes que podría recordar a cualquier gran capital del mundo.

Las fotografías podrán disfrutarse hasta el próximo 11 de octubre. La exposición estará abierta al público de lunes a sábado con un horario de 18.30 a 21.30 horas en la Galería de los Servicios Centrales de Caja Rural de Granada, en la avenida Don Bosco nº 2, retomando así el calendario de exposiciones que quedó en blanco tras los meses de verano y que ahora, vuelve a mostrarse, no solo con las fotografías sino también con sus idas y venidas de visitantes, que tras el lento período estival vuelve al bullicio y alboroto del que se llena la ciudad durante los meses de otoño e invierno, cuando vuelve a florecer el arte.