Hubo un granadino  pionero en el género del documental en la ciudad. Compró una cámara a finales de los años treinta y, en vez de grabar bautizos y comuniones, decidió mirar a su alrededor a través del objetivo. Con este material que arranca al final de la Guerra Civil y que traspasa las décadas hasta llegar a los ochenta trabaja el realizador Óscar Parada. "Por pura casualidad entré en contacto con esta historia y la estimación inicial es que hay sobre 15 horas de grabación que vamos a comenzar en breve a remasterizar", explica el director granadino que acaba de ganar el premio RTVA en el Concurso Tikinó. "Lo que me interesó es que fue un autodidacta que rodó mucho material antropológico". Este artista todavía anónimo filmó labores del campo ya perdidas, celebraciones locales como el Día de la Cruz y el Corpus... "La Filmoteca de Andalucía se ha ofrecido para ayudarme a catalogar imágenes porque no están documentadas", continúa Parada. Las filmaciones más antiguas son de labores del campo ya perdidas donde se ven estampas que  en el siglo XXI impresionan, como niños ayudando en tareas de recolección o sembrando los campos. "No es la típica imagen social o festiva sino que  el autor recogió incluso la llegada del agua a un pueblo de la Vega a través de canalizaciones".

Pero nadie conocía la existencia de estas imágenes, "lo que demuestra la falta de pretensiones de este hombre". Aunque fue autodidacta  no es el trabajo de un aficionado con el habitual 'tembleque en la mano'. Tiene su estilo propio, utiliza el plano detalle, plano general...  "Él iba creando sobre la marcha su propia forma de grabar y además haciendo una fuente documental muy interesante para reflejar lo que pasaba a su alrededor". Grabó por ejemplo unas inundaciones "brutales" en la Vega donde se  ve toda la planicie inundada. En el Triunfo también plasmó la pomposa llegada de un obispo en helicóptero con una muchedumbre esperando. "No abunda este tipo de material y menos dedicado a labores tan concretas como las del campo o a mostrar cómo era el tranvía cuando pasaba por la actual Avenida de la Constitución", defiende el realizador que fue la voz en off durante cuatro años en El juego del Euromillón. La idea final es hacer un documental "con imágenes que van a recordar a mucha gente cómo era su vida hace 50 años". El proyecto es mezclar la ficción y el documental a través de una hipotética experta en cine  que llega  a Granada a tasar el valor de esas imágenes. Este personaje de ficción nunca ha estado en la ciudad y se queda maravillada por este material, por lo  aprovecha para conocer mejor Granada y se acaba comparando la ciudad de hace décadas con la actual. "Intentaremos cuadrar los planos, que el encuadre que él utilizó en una localización sea el mismo que nosotros empleemos ahora en el siglo XXI"

De momento, el director ya ha mantenido contactos con estudios de música "potentes" como 5 Notas de Madrid para montar una banda sonora que debe ser el tercer pilar del proyecto. El objetivo final "es rendir un tributo a una persona anónima que quiso reflejar su tiempo a través de un medio tan novedoso en su  tiempo como el cine". Y sin ninguna gana de notoriedad.  El proyecto ya está en marcha y  Óscar Parada está en un proceso casi más difícil que encontrar un archivo desconocido: buscar financiación. También le queda buscar un título para el documental y, cuando la familia acceda, poner  nombre y apellidos al cineasta anónimo.