Los Evangelistas escriben su segundo evangelio sobre Enrique Morente, en esta ocasión con la voz de su hija Soleá, la hija mediana del cantaor fallecido en 2010, quien define este Encuentro, con el grupo granadino como una reunión de amigos que comparten "una religión, un evangelio: su padre".

Los Evangelistas, banda formada por miembros de Los Planetas y Lagartija Nick, habían unido talentos con el legado del artista en su álbum debut Homenaje a Enrique Morente y, a raíz de ahí, la hija del cantaor asegura que se sintió "muy cómoda trabajando con ellos", lo que hizo que siguieran trabajando juntos, que todo fuera "sucediendo" fruto de la "inspiración y de la buena química". Por su parte, Antonio Arias, líder de Lagartija Nick, asegura que el primer disco estaba marcado por el negro, el color del dolor, pero en este Encuentro "asoma el color". Todo esto queda plasmado en la portada diseñada por Aurora Carbonell, viuda del cantaor, con mucha luz pero con un borde negro. En cuanto a la música, Los Evangelistas continúan explorando los márgenes de la obra de Morente, que siguen estudiando como si fueran opositores a notario. "Hemos planteado la producción como un cuadro, más que un arreglo concreto hemos buscado la impresión el paisaje", continúa Arias aunque es consciente de nunca se podrá llegar a la hondura del autor de Pequeño vals vienés, "a esos giros con la armonía de la voz". En su opinión, "nunca llegaremos a profundizar en su obra porque no se puede conocer su profundidad, pero sí al menos tenemos su código".

También tenían un montón de material que no entró en el primer disco y con el que querían seguir experimentando. Y contaron con Soleá, "una voz virgen y libre" con muchas ganas de romper moldes, de comerse el escenario.

Mientras, la cantante, comenta que se sintió "muy orgullosa" cuando se enteró de que la banda estaba trabajando en el homenaje a su padre, al que también rinden admiración con su nuevo trabajo, pues, "todo es por él, su música y su persona son nuestra fuente de inspiración".

Sobre su nuevo trabajo con Los Evangelistas, de los cuales dice estar "aprendiendo mucho", explica que el proceso creativo ha sido "colectivo" y que ha habido "muy buen entendimiento" ya que cada uno ha aportado lo que mejor sabe hacer, sin que hubiera nada premeditado, pues, para ella, "la música sucede". "Nosotros venimos de la escuela de la libertad y de la sensibilidad, el único propósito es sentir y hacer sentir a los demás a través de la música".

Siempre con su padre en la mente, la granadina ha retomado el disco en el que empezó a trabajar con él antes de que falleciera. "Él me estaba produciendo el disco. Desgraciadamente no lo llegué a terminar y ahora estoy volviendo a darle forma, aunque su esencia dio tiempo a que quedara", afirma la cantante, licenciada en Hispánicas en la Universidad de Granada.

Morente confiesa que su padre es "su evangelio, su religión", que le influye en todo y que siempre intenta pensar qué pensaría él, ya que su sabiduría le "ha abierto caminos para andar por la vida a través del arte", y es que, a pesar de que ya no esté, sigue "aprendiendo cosas de él".

Además de la música, recientemente el teatro ha ocupado la vida de la artista, que ha participado en Yerma. Sobre su paso por las tablas destaca que "el teatro ha sido una aportación increíble a la hora de salir al escenario" y que "podría comparar la sensación de cuando sales a cantar a cuando sales a interpretar", ya que "es el mismo respeto".

Sus planes de futuro son seguir con el teatro, con su disco, formándose en la música y trabajando con Los Evangelistas, con los que apuesta por un futuro encuentro, ya que "se han quedado muchas cosas en el tintero". Aquí coincide con Arias, quien ve en este encuentro una forma de combatir el dolor de la ausencia del cantaor granadino.

Encuentro, que salió ayer a la venta, es, según Antonio Arias, "una obra que trasciende a nuestro corazón, un homenaje continuo a Enrique Morente". Y cuando se habla con el líder de Lagartija Nick es inevitable hacer referencia a Omega, el disco que sacudió a flamenco y rockeros y los dejó abrazados a una duda. "Nos pilló con tal nivel de compromiso que fue un trabajo hecho con el corazón", detalla el músico, que desvela que antes de la muerte del cantaor tenían el proyecto de reeditarlo pero "con mezclas distintas para darle un aire más vanguardista". Aún más si cabe.