La Bolsa española cayó ayer el 3,6% y perdió el nivel de los 6.700 puntos afectada por la recogida de beneficios y la posibilidad de que se desencadene una nueva guerra comercial entre Estados Unidos y China.

El índice de referencia del mercado nacional, el Íbex 35, bajó 249 puntos, ese 3,6%, el mayor descenso desde mediados de abril, hasta 6.673,3 puntos. Las pérdidas anuales crecen al 30,12%.

En el resto de Europa también hubo pérdidas: París cayó el 4,24%; Milán, el 3,7%; Fráncfort, el 3,64%, y Londres, el 0,16%.

El mercado nacional resultaba afectado la caída de Wall Street del viernes (el índice Dow Jones de industriales cedió el 2,55%; el S&P 500, el 2,81%; y el Nasdaq, el 3,20%). Además, influyeron negativamente las amenazas del presidente estadounidense, Donald Trump, de imponer aranceles a China mientras exigía responsabilidades a ese país por la pandemia del coronavirus que, según el secretario de Estado, Mike Pompeo, se había originado en un laboratorio de Wuhan.

El precio del petróleo Brent, de referencia en Europa, bajaba alrededor del 3% a mediodía, hasta 25,5 dólares, aunque al cierre bursátil remontó levemente y se cambiaba a 26,4 dólares.

De los grandes valores y de los componentes del Íbex sólo subiñi Telefónica, el 2,85%, después de conocerse que podría unir su filial británica O2 con Liberty Global, mientras que Repsol bajó el 7,79%; Inditex, el 6,45% BBVA, el 6,26% (sexto); Banco Santander, el 3,83%; e Iberdrola, el 2,12%.

La deuda española aumentaba su rentabilidad diez centésimas y se situaba en el 0,82% y la prima de riesgo avanzaba a 139 puntos básicos.