La Bolsa cerró con un leve recorte del 0,09%, que se suma a la caída de anteayer del 1,6%, lo que la sitúa de nuevo como la peor de las plazas europeas, en un movimiento vendedor impulsado sobre todo por los bancos, que le ha llevado a quedarse al borde de los 9.400 puntos.

El Íbex 35 se dejó en la sesión 8,60 puntos, el 0,09%, hasta los 9.409,60 puntos, con lo que desde el viernes anterior cede un 1,01% y en el año gana un 10,18%.

Sin embargo, los bonos españoles siguen cotizando a la baja, en el 0,976%, desde el 0,991% de anteayer, con la prima de riesgo bajando hasta los 95 puntos básicos.

Los bancos siguieron en posición vendedora: Sabadell encabeza las pérdidas, con una caída del 2,63%, seguido de Bankia y Bankinter, que bajan el 1% cada uno y Santander cede el 0,59%.

El mercado de renta variable español acumula el peor registro desde el inicio del año de las grandes plazas europeas, sólo por detrás de Londres donde la fuerza de las incertidumbres derivadas del Brexit ha llevado a los inversores a ser más cautos.

Las bolsas europeas siguieron la estela del mercado americano, después de que los últimos datos del mercado laboral publicados en EEUU hayan situado la tasa de desempleo en el 3,6%, la más baja en 49 años.

En Europa, todas las grandes bolsas cerraron en positivo, con avances del 0,55% en Fráncfort, del 0,40% en Londres, del 0,24% en Milán y del 0,18% en París.

En el mercado español, al margen de los bancos, registraron caídas significativas Meliá, un 1,59%, amenazada por el endurecimiento del embargo a Cuba, que podría traducirse en demandas sobre los hoteles del grupo español.

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