Res Pública

José Antonio Montilla

montilla@ugr.es

El AVE de la tarde

Llegó la pandemia y todo se paró, pero cuando queremos volver a la normalidad, también debe hacerlo el tren

La mejora de las comunicaciones por ferrocarril es el gran objetivo estratégico de Granada en materia de transportes para los próximos años. El elemento clave es, sin duda, el corredor mediterráneo, con su salida al puerto de Motril, pero también la variante de Loja, el soterramiento de la entrada en Granada o la conexión del norte de la provincia con el levante. Son los grandes retos, pero hay otro, más pequeño, que es para ya, para la semana que viene mejor que para la siguiente. Me refiero a la comunicación ferroviaria con Madrid que, en un país radial como el nuestro, supone conectarse con el resto de España. Con la llegada del AVE dimos un buen paso. La ciudadanía de Granada y quienes nos visitaban parecían estar adquiriendo una cultura del tren. De hecho, estaba previsto aumentar las frecuencias diarias con las que inició su funcionamiento.

Y en esto llegó la pandemia. Todo se paró; también el tren. Por eso ahora, cuando queremos volver a la normalidad, también debe hacerlo el tren. Para Granada es relevante. Los turistas ya están aquí pero en sus coches particulares, generando más contaminación. Por otro lado, resulta conocido el potencial de Granada en nuevas energías, inteligencia artificial, biomedicina, etc., con una universidad puntera y grandes proyectos en marcha. Para facilitar el desarrollo de estos proyectos, y de otros que puedan venir, hemos de ofrecer la posibilidad de llegar y salir de Granada con facilidad, en transportes públicos cómodos y a precios razonables. El AVE cumple esa función. Sin embargo, en la actualidad no es fácil el viaje de ida y vuelta en el mismo día entre Granada y Madrid o llegar a última hora desde cualquier lugar para una reunión o participar en un Congreso al día siguiente. Simplemente con recuperar el AVE de la tarde de antes de la pandemia sería posible.

Quizás no exista aún la demanda suficiente y Renfe tiene que cuidar su cuenta de resultados. Las empresas públicas han de ser eficientes pues no pueden dar argumentos a la derecha privatizadora. Sin embargo, en un difícil equilibrio, deben cumplir también una función social. En este caso, simplemente con recuperar el AVE de la tarde entre Madrid y Granada se estaría ayudando al futuro económico de esta tierra pero también a la lucha contra el cambio climático en una de las ciudades más contaminadas de España. Bastaría para ello con enganchar o desenganchar un tren en Antequera del último que hace el trayecto entre Málaga y Madrid, y viceversa, para conectar con Granada. La rentabilidad social y medioambiental está garantizada.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios