Rosa de los vientos

Pilar Bensusan

bensusan@ugr.es

Arboricidas

Tanto a Cuenca y compañía como a sus antecesores les resulta más barato talar que cambiar proyectos

Me produce tal indignación que la Junta andaluza haya ya decidido aparcar la ampliación del metro de Granada para otro mandato, échenle 5-6 años cuanto menos, que voy yo también a posponer mi artículo al respecto, porque mi enojo es mayúsculo, máxime cuando era su estrella electoral para Granada. Y es que Granada no cuenta nada en esta autonomía y así nos va…

Pero hay otro tema, de los muchos que nos producen indignación a los granadinos, que sí debe contar, ya que tiene solución desde Granada, como es el del arboricidio continuo que practican sistemáticamente los consistorios que nos han caído en desgracia, y el de Paco Cuenca no es una excepción.

Como si ya no tuviéramos poco con las pintadas que inundan nuestras calles y monumentos, y con la suciedad que nos invade, la tala de árboles sin reposición alguna es una constante en la ciudad del cementazo.

Y es que tanto a Cuenca y compañía como a sus antecesores está claro que les resulta más barato talar que cambiar proyectos, y/o echar cemento en los alcorques de los árboles que talan, que negarse a talar. Aunque a veces son más sutiles y tapan los alcorques con losetas pensando que no nos daremos cuenta. Lamentable.

¿Y qué decir de las amputaciones que les hacen a los que sobreviven? Los dejan con cuatro ramas sin hojas, y en verano... Algunos no aguantan y se secan. ¿Y las gamberradas sin control que mutilan y sesgan árboles?

Miren señores ediles, sin tan siquiera entrar en sus beneficios medioambientales, los árboles son seres vivos a los que hay que respetar y que tienen derecho a la vida, algunos son incluso monumentos vivos y no pueden cortarse ni por dinero ni por proyectos. Pero se ve que ustedes no conocen los más mínimos principios del respeto a la naturaleza, eso sí, defender el medio ambiente el de izquierdas, y los que no somos de su cuerda no podemos ser defensores del medio ambiente, como yo y otros muchos que no tenemos su ideología y llevamos haciéndolo desde hace décadas. Y es que es muy bonito ponerse la camiseta verde cuando toca, para luego talar árboles sin piedad.

Son arboricidas, porque talan árboles sin necesidad -la más reciente en el eje Arabial-Palencia-. Sepan que son los coches los que deben adaptarse a los árboles y no al contrario, máxime si queremos una Granada más amable, ecológica y libre de emisiones, y no la Granada desagradable, sucia y desapacible a la que ustedes nos condenan.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios