Asegurar las pensiones

Son esenciales en el modelo social de convivencia si forman parte de un sistema sólido, solvente, sostenible y equitativo

Aunque aún quedan algunos detalles por concretar, hemos conocido que parece que ya hay un acuerdo entre el Gobierno, los empresarios y los sindicatos para acometer una reforma del sistema público de pensiones que pretende asegurar la sostenibilidad futura del sistema.

Si finalmente se confirma, es evidente que se trata de una buena noticia. No sólo por el hecho de que nos aporta un gran acuerdo nacional a nuestra actualidad política (estamos muy necesitados de grandes acuerdos), sino porque puede sentar las bases para que dispongamos de la tranquilidad necesaria que requieren las diferentes generaciones de pensionistas actuales y de pensionistas futuros.

Muchos analistas nos trasladan los grandes desafíos que la sociedad actual tiene que afrontar ante las enormes transformaciones que desde el punto de vista tecnológico y demográfico se nos están presentando. Ganar dichos desafíos requiere abordar reformas estructurales que permitan asegurar la máxima competitividad de la economía para que sea capaz de generar riqueza y repartir una parte en las diferentes prestaciones del Estado del Bienestar.

Las pensiones públicas son esenciales en el modelo social de convivencia si forman parte de un sistema sólido, solvente, sostenible y equitativo. Deben ser pensiones dignas capaces de dar soporte a las necesidades esenciales de los trabajadores cuando, por edad o por enfermedad, dejan de formar parte de la población activa. Es uno de los sistemas de solidaridad intergeneracional más potentes y con más capacidad de generar cohesión social.

Por todo ello, asegurar la sostenibilidad y la solvencia del sistema público de pensiones forma parte de los asuntos de Estado que requieren de la generosidad y la altura de miras por parte de todos. En especial, por parte del Gobierno y de los agentes sociales.

Y es un soplo de aire fresco poder comprobar que, a pesar del clima político tan crispado en las relaciones entre los partidos políticos, los empresarios y los trabajadores son capaces de llegar a esta gran acuerdo junto al Gobierno. Es para tomar nota porque esta es una de las grandes reformas necesarias para asegurar un futuro mejor para todos.

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