Granada, tras haber perdido tantos trenes culturales, se quiere subir -no sin retraso- al carro de las series con un festival por todo lo alto. Las series, esos productos audiovisuales que se reproducen como esporas y de los que finalmente valen muy pocos. Un ejemplo de serie que trasciende y está a la altura del mejor cine es The Wire, obra maestra de cabo a rabo. Ojalá alguien tuviera arrestos para hacer una versión local de esta serie que coge los dramas universales para actualizarlos con la ciudad de Baltimore de protagonista. La primera temporada hablaría de la lucha policial contra los clanes de marihuana. La segunda, de los estibadores del Puerto y los problemas sindicales en medio de una sociedad depauperada siempre con la 'maría' de fondo. La tercera se metería en la Plaza del Carmen desde el caso Nazarí hasta Cuenca (Carcetti) y Luis Salvador, con el problema de los cortes de luz como McGuffin. La cuarta sobre el deterioro de la Educación Pública. Y la quinta sobre la podredumbre de la prensa en la era del click. Sería un bombazo.

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