Se nos llena la boca a los granadinos con lo 'bonica' que es nuestra ciudad pero a la mínima cogemos el coche para ir a comprar pan a la esquina de al lado. Granada no es una ciudad grande, su término municipal es reducido y la posibilidad de cruzarla de punta a punta en poco más de una hora es bastante plausible. Es decir, que la mayoría de los desplazamientos interurbanos que hacemos (siempre que la salud y las condiciones meteorológicas lo permitan) los podríamos hacer a pie. Por no hablar de coger una bici o un patinete. Sí es cierto que existe un déficit de carriles bici y de conexión entre la capital y la cada vez más extendida y habitada Área Metropolitana. Entre las propuestas del Ayuntamiento para solventar las taras de la movilidad ahora aparecen los parking disuasorios con módicos precios para que quien llegue a la capital aparque el coche rápidamente y se empiece a mover de una manera más sostenible. Granada es para andarla mientras las piernas resistan y pararse a contemplar y a escuchar cada uno de sus rincones, los bellos y también los feos. Que haber, hay de todo.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios