Mirada alrededor

Juan José Ruiz Molinero

jjruizmolinero@gmail.com

Regalos de Navidad para delincuentes

Sánchez, tras los indultos, eliminar delitos de sedición y rebajar la malversación es el Papá Noel de sus socios

Estamos en Navidad y don Pedro Sánchez es generoso con los socios, a los que les debe mantener su inquilinato en La Moncloa, aunque en sus grupos haya delincuentes condenados por graves delitos contra el Estado. Para ellos ha sacado adelante la reforma del Código Penal, en medio de la vergonzosa euforia de sus parlamentarios, donde desaparece el delito de sedición y rebaja las penas de los de malversación. El primer obsequio fue el indulto y los siguientes pagos han sido la supresión de la sedición y reducir la malversación, abriendo paso a dulcificar la terrible lacra de la corrupción política que unos y otros partidos han ejercido, ante la indignación de los ciudadanos. Estos regalos pactados con delincuentes han irritado no sólo a la oposición -que aprovecha cualquier ocasión para erosionar al Gobierno, aunque tenga ella muchos motivos para avergonzarse-, sino de destacados socialistas históricos o en activo, por lo que estos regalos no sólo son motivo de reacciones derechistas, sino cuestión de ética, y vergüenza política, líneas rojas que no debiera traspasar ningún gobernante. Porque lo peor de todo es que Sánchez ganó los votos proclamando todo lo contrario de lo hecho ahora. Cuando se recurre a declaraciones anteriores, lo encontramos pidiendo agrandar todos esos graves delitos suprimidos o disminuidos del Código Penal, inflexible contra todo tipo de corrupción, que no gobernaría con el entonces líder de Podemos al que atacaba por pedir dominar el poder judicial, dirigir la TV pública, etc.

El encontronazo PSOE-PP con el Tribunal Constitucional tiene no sólo la necesaria renovación de los magistrados que lo componen, con fechas caducadas por falta de consenso entre los dos grandes partidos, sino el control de estos órganos que debían ser independientes. Dividir a sus integrantes en dos bandos -conservadores o progresistas-equivale a decir que da igual cuales sean las mayorías, porque los conservadores -golpistas, machistas, etc. han sido llamados por miembros del Gobierno- seguirán las directrices de la derecha y los progresistas, los de la izquierda, hoy en el poder, con los que creen poder llevar a cabo cambios legislativos sin contratiempos -está pendiente el presunto referéndum de independencia en Cataluña, el último regalo esperado por los actúales delincuentes-, lo que también es un insulto a los magistrados progresistas que ven así manchada su imparcialidad. ¡Si Montesquieu levantara la cabeza!

En fin, es tiempo de Navidad. Todos tenemos derecho a algún detalle. ¡Feliz Navidad a todos: gobernantes, jueces, oposición, incluso delincuentes… pero, sobre todo, a los ciudadanos que asistimos absortos al esperpéntico espectáculo!

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios