Res Pública

José Antonio Montilla

montilla@ugr.es

Tiempo de balance

En estos tres añós y medio el Gobierno andaluz no ha hecho prácticamente nada: sólo han aprobado ¡20 leyes!

Terminada la legislatura, es el momento de hacer balance del Gobierno de Moreno Bonilla en Andalucía. Puede pensarse que este espacio es escaso para dicha tarea. Sin embargo, no es así por la simple razón de que en estos tres años y medio el Gobierno andaluz no ha hecho prácticamente nada. Si quieren un dato que refleja esta realidad, más allá de la propaganda, en toda la legislatura se han aprobado ¡20 leyes! En las Cortes Generales, sólo en 2021 se han aprobado 33. Y resulta extraño pues cuando llega un nuevo gobierno quiere cambiar muchas cosas para lo que presenta proyectos de ley. Pero no ha sido el caso del gobierno de la derecha en Andalucía. Tanto antes de la pandemia como después de los estados de alarma, la actividad legislativa ha sido inane.

Esa inacción se advierte también, como es lógico, en el desarrollo de las políticas públicas. Las infraestructuras necesarias para Andalucía siguen esperando pues en estos años sólo ha habido anuncios publicitarios. Esto ha supuesto un problema para la Consejera de Fomento. Como tenía que justificar agenda en la provincia de Granada todas las semanas no tenía más remedio que anunciar varias veces la misma actuación. Así, hay rotondas que han sido presentadas, con todo boato, al menos cuatro veces.

Pero el ámbito en el que resulta más evidente la parálisis ha sido el de las políticas sociales, precisamente el fundamental en la actuación de un gobierno autonómico. En política económica o de empleo es el gobierno central quien marca el camino, afortunadamente para Andalucía que se está viendo ya beneficiada por la reforma laboral o el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. Sin embargo, en sanidad, educación o servicios sociales la competencia es autonómica. El problema es que en políticas sociales, parálisis significa retroceso como muestra la sanidad andaluza. La sanidad pública en Andalucía está peor que hace cuatro años, y entonces no estaba bien. El despido de 8000 profesionales sanitarios, 1600 de ellos en Granada, es un dato tan elocuente que apenas precisa mayor argumentación. Pero si quieren algún dato más basta mirar a las listas de espera. Era un problema endémico en la atención hospitalaria. Lo que ni los más pesimistas podían imaginar es que íbamos a tener listas de espera hasta para pedir una cita en la atención primaria.

En fin, va a tener que echarle imaginación el gobierno de Moreno Bonilla para presentar el balance de gestión pues el programa electoral con el que concurrieron a las elecciones poco tiene que ver con la realidad de una legislatura perdida.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios