Quousque tamdem

Luis Chacón

luisgchaconmartin@gmail.com

La agencia de Manuel

Si esta era la regeneración que prometió Ciudadanos, esperábamos más del gobierno andaluz del cambio

El video de la pareja del Director General de la Agencia Pública Andaluza de Educación es de una banalidad tan insultante que provoca una profunda vergüenza ajena. No habría espacio en esta columna para enumerar los adjetivos que podrían calificarlo. Se me ocurren un puñado: hortera, frívolo, trivial, insultante, vano, fútil… Y así, ad infinitum. Quizá sea el signo de estos tiempos de grosera exhibición de lo privado -y hasta de lo íntimo-, pero el lugar de trabajo no puede convertirse en un circo de tres pistas donde familiares y amigos se dediquen a ejecutar volatines para sumar likes a sus perfiles en esa insustancial feria de las vanidades que son las redes sociales. Un día de estos nos encontraremos imágenes del submarino de mi cari compartidos por la pareja de quien ocupe la cartera de Defensa. O con un flashmob de los hijos de los diputados, disfrazados con las libreas de los ujieres, en el Salón de Plenos del Congreso. Y es que tanto pamplineo nos acabará matando. Pero, en fin, ¿qué se puede esperar de una sociedad que consiente la chabacanería porque dice valorar la naturalidad y confunde la buena educación con la más tosca hipocresía?

De todos modos, hay algo que esta acción adolescente y torpe nos ha dejado claro: la facilidad con la que en España, los políticos y todo su entorno se apropian de lo público. La Agencia de Manuel debe ser la versión snob y ultramoderna de L'État, c'est moi de Luis XIV. A veces imagino las noches electorales como la vela de los piratas antes del abordaje en aquellas películas que nos quitaban la modorra en los largos veranos infantiles. Bandas de desharrapados con cuchillos entre los dientes y ojos encendidos que aparecían en el siguiente plano vestidos con la lujosa casaca del Gobernador de Jamaica y tocados con un bicornio cuajado de perlas y plumas de marabú.

Si esta era la regeneración que prometió Ciudadanos, esperábamos más del gobierno andaluz del cambio. Por ejemplo, que al Director General de una Agencia se le escogiera por concurso público y entre funcionarios; no por el dedo divino del consejero, señor Imbroda. O que esta Agencia, uno de aquellos chiringuitos socialistas a extinguir, hubiera desaparecido del organigrama de la Junta. Porque lo público es de todos y además no es gratis. Se paga con nuestros impuestos. Y al ciudadano -no al cari de Ciudadanos- nadie le regala el puesto. Y mucho menos el salario.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios