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La actuación de María Pérez en la Ciudad de la Luz, con la consecución de dos medallas olímpicas –una de plata enlos 20 kilómetros marcha y un oro, junto a Álvaro Martín– en el relevo mixto. Toda una proeza que la eleva a lo más alto del deporte granadino en toda su historia. La marchadora ha puesto el listón muy alto y muy difícilmente se verá algo así en una provincia como la de Granada donde hay muchas zonas que se van vaciando año a año. Es el caso de Orce, el pueblo de María Peréz, y de la comarca a la que pertenece, Huéscar. Ya María tuvo que salir de su pueblo, no muy lejos, para iniciarse en Guadix en una modalidad atlética en la que la Ciudad Episcopal es todo un referente –ahí sigue el nombre de Paquillo Fernández, plata en los Juegos Olímpicos de Atenas–. Los políticos tienen ante sí el reto que que la España que se vacíe no se quede vaciada. De momento, hay que congratularse de que María Pérez ponga de nuevo el nombre de su pueblo en los titulares de todos los medios de comunicación.
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