EL nuevo gobierno de la Diputación de Granada sigue revisando los gastos que considera desmesurados y aplicando la tijera. Una labor digna de encomio en una situación tan crítica como la actual. Sin embargo, y de forma paralela, continúa su labor obsesiva de desprestigio del anterior presidente, de modo que ya no se sabe si aplica la tijera para cortar el presupuesto o para recortarle el traje y la honra al socialista Antonio Martínez Caler. Ahora ha llegado el turno del parque móvil y, en concreto, del automóvil que usó el anterior presidente de la Diputación. El PP ha dado a conocer las características del automóvil ("nevera, sistema de seguridad interior, asientos traseros regulables en altura, tapicería de piel...") como si fuera el no va más del lujo cuando, extra arriba o abajo, tiene las mismas condiciones que el del alcalde José Torres Hurtado, con el añadido de que él en sus desplazamientos necesitas dos: el suyo y el de sus escoltas.