En la aspiración de Luis Salvador por vender Granada yéndose de 'turista' por otras partes del país, el viernes fue el turno de una visita a la ciudad de Córdoba, el lugar en el que le tocó nacer a este granadino con juventud madrileña y madurez en pasillos políticos de la capital de España pero que en realidad es todo un ciudadano del mundo. Salvador sacó el codo a pasear para firmar un convenio con su homólogo cordobés, José María Bellido (PP), desgranando una serie de acuerdos como que la campaña del Día de la Cruz será a pachas entre la ciudad del chavico y la de los patios de mayo. El caso es que el alcalde de Granada celebró este acuerdo por todo lo alto y puso como ejemplo la alianza de Málaga y Sevilla como dos ciudades a las que les está yendo bien sin pisarse la una a la otra. Mucho tienen que correr Granada y Córdoba, las dos capitales con las losetas que atesoran más historia y quizás también en las que mejor funcione la melancolía y el motor de la nostalgia de toda Andalucía. Pero bueno, algo hay que hacer para seguir creciendo y ya se lo podrían comentar hoy ambos a Juanma Moreno en la reunión de alcaldes andaluces.

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