Sin ser del todo unas vacaciones normales debido a la persistencia del Covid-19 en la vida de todo el mundo, se nota que se ha levantado un poco el pie del acelerador. Las calles de Granada ofrecen un aspecto de poca actividad, a lo que también ha colaborado el tremendo calor de estos días. Y es que no hay nada como disfrutar de un merecido descanso en la playa o en la montaña.
Los destinos vacacionales se llenan y las calles se vacían
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