Hoy es el día 'D' para nosotros. A las 19.00 horas será la hora 'H', pero esta vez no se llevará a cabo en playas de Normandía, sino en el Palacio de Deportes de Almería. Ahí será donde se producirá nuestro histórico desembarco en las semifinales de la Superliga.

La semana ha resultado muy ajetreada tras la victoria en cuartos ante el Teruel. Todos los medios de comunicación se han volcado con nosotros y no hemos parado de aquí para allá con entrevistas, reportajes, sesiones fotográficas... algo a lo que no estamos acostumbrados normalmente. Esta dinámica es natural que nos afecte, pero también es cierto que el gran ambiente que reina entre toda la plantilla, una de las claves del éxito de nuestro equipo, evita que eso pudiera llegar a desestabilizarnos. Prueba de ello es que no alteramos la dinámica habitual dentro o fuera de los entrenamientos y el buen humor o las bromas están a la orden del día, sobre todo entre jóvenes y veteranos.

Antes de entrenar, jugamos partidillos de fútbol sala en los que nos enfrentamos los 'pares' contra los 'impares', donde la intensidad siempre es alta y suele haber piques sanos porque la gente es muy competitiva y siempre quiere ganar. Por cierto, que quede constancia de que ayer ganamos de forma clara los 'pares'. También fruto de la gran relación existente entre todos es la celebración, en más de una ocasión a la semana, de lo que denominamos 'comisiones técnicas', que son reuniones para tomar unas cervezas, tapear, reír y hablar de voleibol y de lo que no es voleibol.

El buen ambiente se traslada a los viajes como el de hoy, donde no faltan las partidas de cartas o alguno de nosotros se lleva películas para hacer más llevadero el trayecto, y seguro que nos ayudarán a llegar a Almería sin nervios y sin presión. Luego se ganará o se perderá, pero lo daremos todo. Ya estamos deseando saltar a la pista para intentar tutear en su terreno al equipo más laureado del voleibol nacional, el Unicaja Almería.