Juan José Fernández / Deportes@granadahoy.com

Nunca digas nunca jamás

El presidente del Granada CF ha obviado a Pedro Ruiz y ahí lo tiene, a punto de 'controlar' las cuentas

POR la boca vive el pez, canta Fito y Fitipaldis, que no el presidente del Granada CF. Francisco Sanz, otra vez, y para no variar, peca de bocazas e indocumentado. En un puro acto de meapilas, para ser aclamado por sus turiferarios, se le llenó recientemente la boca diciendo en una entrevista publicada por este diario el 31 de octubre que "lo que sí puedo afirmar es que el señor Ruiz no entrará jamás a administrar el club". Y todos contentos con la bufanda al cuello y el bombo de Manolo bajo el brazo. Y ahí tienen: el juzgado de Primera Instancia cinco dictó el 13 de noviembre una providencia, ahora notificada a las partes, en la que da carpetazo a la enésima solicitud por parte de los servicios jurídicos de la entidad rojiblanca para evitar la administración de los bienes del Granada CF por parte del tal señor Ruiz, como le llama el niño de papá Sanz.

El ex presidente, con o sin razón, me da igual que igual me da, tenía su derecho a acudir a los tribunales, del mismo modo que cualquier otro ciudadano -Carlos Marsá incluido- o como ha hecho el propio club, todavía dirigido por Sanz, contra Pedro Ruiz por la vía penal. La cuestión es que ya es una realidad la administración de los bienes del Granada CF por parte de Pedro Ruiz, salvo que se ralentice o evite la operación por un nuevo recurso al que tiene derecho el club.

Nunca he comulgado con Pedro Ruiz, su forma de ser y de actuar. Lo que tengo muy claro es que gracias a él, para lo bueno o lo malo, el Granada CF sigue vivo. La pasta de 'papi' llegó mucho después, no se llene también la boca atribuyéndose ese mérito, señor Sanz. A las hemerotecas y las videotecas es imposible confundir. Las narices que dice tener espero que las utilice para, entre otras cosas, hacer público algún día el informe de auditoría, que ahí está la madre del cordero, incluso para frenar la intervención de Pedro Ruiz.

PD: Los calificativos usados son los mismos que Francisco Sanz utiliza contra mí o mis compañeros. El de turiferarios es mío.

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