editorial

Más diputados no quiere decir mejores

EL presidente de la Junta, José Antonio Griñán, se mostró anteayer receptivo ante la iniciativa de Izquierda Unida de aumentar el número de escaños del Parlamento andaluz. Griñán se declaró dispuesto a incluir la cuestión entre los asuntos a considerar durante el próximo Debate sobre el estado de la Comunidad. El Estatuto de Autonomía vigente contempla la posibilidad de ampliar la Cámara, ya que habla de "un mínimo de 109" miembros. Esta cantidad fue fijada desde las primeras elecciones del autogobierno, en mayo de 1982, y se ha mantenido inalterable a pesar de que la población andaluza ha experimentado un fuerte crecimiento. Al igual que otras comunidades autónomas, Andalucía estaría legitimada para elegir más diputados teniendo en cuenta este incremento del cuerpo electoral. Eso permitiría una representación más exacta y plural y favorecería la consolidación de las minorías parlamentarias (ahora IU, pero también el PA en legislaturas anteriores), al bajar el número de votos que necesitarían para obtener escaños en la Cámara. Pero el cambio legislativo también presenta inconvenientes. Por un lado, las exigencias de austeridad que se plantean por la sociedad a toda la clase política no parecen muy acordes con un aumento de cargos públicos y, por tanto, de gasto. Quizás no necesita Andalucía más parlamentarios, sino mejores: más preparados, más solventes, más dedicados a la labor para la que se les elige y con otras formas y métodos de acción política. Por otro, es cuestionable que se pretenda alterar las reglas del juego cuando está a punto de terminar, es decir, a pocos meses del final de la legislatura (y eso, si el proceso parlamentario hace posible que la ley esté a tiempo). En todo caso, la reforma debería hacerse por consenso, y en este sentido desde el Partido Popular se sospecha que estamos ante una maniobra destinada a evitar su mayoría absoluta en 2012 al potenciar la representación de IU, que podría sumar sus escaños a una coalición con el PSOE. El asunto es polémico.

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