El 14% de los granadinos vive en zonas de exclusión social, un dato que estremece al pensar en los miles de niños que tienen que convivir en su día con situaciones dramáticas. Muchos de los barrios que salen en el informe suelen aparecer en las noticias de forma recurrente por tráfico de drogas, enganches ilegales o plantaciones de marihuana, pero no hay que caer en el gran error de identificar con actividades ilícitas a todos los que viven en estas zonas. Muy al contrario, abundan mucho más los ciudadanos ejemplares que intentan vivir de la mejor manera posible pese a que el contexto no es el más propicio. Está claro que el sueño de muchos es prosperar para poder cambiar de barrio, pero también son muchos los que no renuncian a sus orígenes y que lo único que piden es que haya trabajo y que las fuerzas de seguridad puedan erradicar para siempre las actividades delictivas. La pobreza sigue siendo la gran lacra de la sociedad del siglo XXI, por lo que urge de una vez por todas un verdadero impulso de las instituciones para acabar con los focos de marginalidad.
Comentar
0 Comentarios
Más comentarios