Rosa de los vientos

Pilar Bensusan

bensusan@ugr.es

¡Qué frío!

La pasividad del gobierno de Sánchez está provocando su estancamiento y ya leve caída electoral

El que hayamos pasado del verano a pleno diciembre sin transición alguna ha propiciado que nos aclimatemos rápidamente a este cambio radical, hasta ha nevado en Sierra Nevada. Pero donde no sé sabe si se están acostumbrado ya al cambio en la intención de voto que está provocando la violencia del procés tras la sentencia del TS, es en Moncloa. Y es que en el despacho del supuesto "gurú" Iván Redondo debe hacer mucho mucho frío, que también alcanza a Sánchez.

Don Iván no se esperaba que Cataluña se iba a convertir en el aguafiestas de su plan perfecto de repetición electoral para acercar a Sánchez a la mayoría absoluta que no consiguió el 28-A. Una auténtica guerra urbana, alentada por el propio Torra, terrorismo independentista, auténticas acciones de rebelión, que debían de haber llevado ya a Torra al trullo, como máximo responsable de la violencia en Cataluña, están echando por tierra las maquinaciones electorales cocinadas por Redondo con la ayuda de Tezanos y su falso CIS.

La pasividad del gobierno de Sánchez, su falta de decisión y contundencia, como sí se hace en Francia sin ambages y sin complejos, está provocando su estancamiento y ya leve caída electoral, que pudiera acentuarse en las próximas semanas.

Ante este panorama no es de extrañar que suban PP y Vox y que Cs caiga en picado, tras los numeritos de Rivera para no pactar con el PSOE, y puede pasar a ser quinta fuerza política. En la extrema izquierda, Iglesias está más calladito que de costumbre, pues mientras más hable, más votos se le irán a Más País.

También está empezando a hacer frío en muchos otros despachos, no sólo en los de Redondo o Rivera, como en el del propio Torra, que enmascara su connivencia con los violentos bajo un falso manto de paz y democracia que ni él mismo se cree, y siempre con la excusa de que España nos roba, nos oprime, nos trae violencia.

Pero sí, en el despacho de Torra también hace frío, Sánchez no le coge el teléfono, la policía lo tiene fichado por su relación directa con los CDR en el plan para tomar el Parlament y en la violencia vivida estos días en Cataluña. Para más inri, Artur Más quiere sustituirlo por el instigador Guardiola, al que ha sondeado para que opte a presidir la Generalidad.

Y Rufián también está empezando a enfriarse tras recibir de los suyos su propia medicina ahora que lo tildan de traidor.

Quizás tras el 10-N tampoco sume ningún bloque, pero debería imponerse la cordura para evitar que seamos los españoles los que más frío pasemos…

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