El patio político

Guillermo Ortega

Otro mito que se derrumba

Aestas alturas ya se han hecho todos los análisis postelectorales lógicos, los del tipo: "Castellano no dimitió para que el PSOE intentara pactar, sino porque sabía que el PP ya lo había hecho y no le apetecía nada quedarse cuatro años en la oposición". O bien este otro, más misterioso, en plan: "Seguro que detrás del apoyo de UPyD al PP en Armilla hay algo, eso de dar todo por nada no me lo puedo creer".

Pero queda la posibilidad de hacer análisis de segunda fila, de serie B; hasta absurdos, si preferimos llamarlos así.

Por ejemplo: ¿Qué fue del mito que decía que si el PP arrasa en la capital es porque los jóvenes, que son los que tiran para la izquierda, se ven obligados a vivir en el Cinturón? Pues que ha quedado desmontado, por los suelos, roto en mil pedazos, hecho trizas, etcétera.

Porque mirando los resultados, se da la circunstancia de que el PSOE sólo ha ganado por mayoría absoluta en dos ciudades cercanas: Maracena y Pinos Puente. En cambio, el PP ha hecho lo propio en Churriana de la Vega, Otura, Huétor Vega, Alhendín o Cenes. En estas tres últimas ciudades hasta ahora gobernaban los socialistas, así que habría que preguntarse si ese cambio lo han propiciado nuevos vecinos procedentes de Granada y ya abducidos por el conservadurismo que impera en la capital desde hace la pila de años, o si es que los de antaño, los que antes votaban al PSOE, se han visto arrastrados por esa marea azul que, por lo que parece, es imparable.

Cuando todo se derrumba alrededor, Maracena aún resiste. Y Pinos Puente, que parecía perdido para la causa, renace. No quiero ni imaginarme que el hijo de un socialista de toda la vida va y le dice a su padre que va a independizarse, que se va con su novia (hasta ahí todo bien, siempre que el padre no sea muy antigüito) y que han decidido comprarse un piso en Alhendín.

Al borde de la apoplejía, el progenitor le implorará que no lo haga. Apelando a la memoria de Pablo Iglesias, al carisma de Felipe o al mal genio de Guerra, le rogará que lo reconsidere y que se vaya a Maracena o a Pinos Puente, no sea que también terminen cayendo.

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