En estos días en los que la provincia de Granada se ha quedado sin desescalar por no entrar ninguno en el nivel 2 de alerta, más de un hostelero y comerciante manifiesta su malestar por mantenerse el cierre de sus negocios a las 18:00 horas. Un ejemplo, el captado ayer en una papelería de la capital, en la que ha colgado en su escaparate el motivo -y su incomprensión- por el horario impuesto para bajar la persiana cada día. Ya saben, opiniones haberlas haylas, igual que respuestas. ¿Capricho o no?
Comentar
0 Comentarios
Más comentarios