El que fuera alcalde de Castril, José Juan López Ródenas, ha sido absuelto por la Audiencia de Granada de los delitos de malversación de caudales públicos y de prevaricación por lo que fue juzgado tras ser acusado de haber gastado de forma irregular más de 47.200 euros en taxis entre el 2008 y el 2011.

La Sección Primera, según recoge la sentencia a la que ha tenido acceso Efe este lunes, ha fallado que no ha quedado acreditado que, "en caso alguno y dentro del período indicado", el procesado hubiera utilizado los taxis para desplazamientos privados o no relacionados, de una u otra forma, con las funciones propias de su cargo o de los servicios que eran prestados por el Ayuntamiento.

"No se ha practicado prueba de cargo suficiente, pudiera afirmarse que prácticamente ninguna, a fin de poder avalar ni siquiera de forma aproximativa, el relato de hechos sobre el que ambas acusaciones, pública y particular, pretenden obtener una sentencia condenatoria", recoge la sentencia.

La Fiscalía mantuvo el pasado 5 de noviembre, en sus conclusiones definitivas, su petición de cuatro años y medio de prisión para López Ródenas, mientras que la acusación particular ejercida por el Ayuntamiento también siguió solicitando nueve años y tres meses de inhabilitación para el acusado.

Tras conocer el fallo absolutorio, contra el que cabe recurso de casación, López Ródenas, junto a su defensa ejercida por el abogado José Ángel Rodríguez, ha lamentado que a lo largo de la instrucción iniciada en 2014 haya sufrido "un auténtico escarnio público".

"Se ha demostrado ahora, tras la sentencia dictada siete años después, que la partida correspondía a la totalidad de gastos de viajes de la corporación municipal durante años y todos los viajes realizados estaban justificados y relacionados con la gestión pública, sin que exista el menor atisbo de ilegalidad en la actuación del exalcalde de Castril en los hechos imputados", ha indicado.