El Centro de Cría de Huétor Santillán, un proyecto de la Consejería de Medio Ambiente, se encuentra actualmente en fase de pruebas después de que hayan finalizado las obras en sus instalaciones, que prevén una producción estimada de 50.000 truchas y otros 50.000 cangrejos de río anualmente.

Estas cantidades de especies servirán para recuperar todos los tramos potenciales identificados previamente en el territorio andaluz.

Este centro forma parte del Plan de Recuperación de Especies de Aguas Epicontinentales, que presenta entre sus líneas de actuación la conservación ex situ en centros de cultivo. Con este fin, actualmente se está formando una red constituida por los centros de Los Villares en Córdoba, La Ermita en Granada y la piscifactoría del Borosa en Jaén, con diferentes características y potencialidades de cultivo.

La delegada del Gobierno andaluz en la provincia de Granada, María José Sánchez Rubio, visitó, con motivo del Día Mundial del Medio Ambiente, las instalaciones ubicadas en el paraje conocido como La Ermita en el Parque Natural de la Sierra de Huétor, cercano al lugar de nacimiento del río Fardes.

Estas instalaciones han contado con un presupuesto superior a 1.800.000 euros. María José Sánchez señaló que "para la Junta de Andalucía es muy importante trabajar en la línea de recuperar y conservar el hábitat de los cursos fluviales y devolverles su estado natural, porque trabajar en la conservación del del Medio Ambiente es una apuesta acertada del Gobierno andaluz. Está más que comprobado que contribuye al desarrollo sostenible y a su vez económico de los pueblos".

Este espacio consta de diversas áreas en las que se reparten dependencias como sala de usos múltiples, oficinas, laboratorios, aseos, almacén, sala de cultivo intensivo y alevinaje, estanques de hormigón exteriores para cultivo de cangrejo de río, otros para el cultivo de trucha común y zonas inundables para mantenimiento de poblaciones de anfibios.

Las especies que se producirán en el centro granadino son fundamentalmente la trucha común y el cangrejo de río, que actualmente tienen graves problemas de conservación en el medio natural. Secundariamente, otras especies como las náyades o almejas de río, las colmillejas, blenios o pez fraile, además de diversas especies de anfibios, podrán ser cultivadas en dichas instalaciones.