El Ayuntamiento de Baza inició ayer el procedimiento para que la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) declare la fiesta popular del Cascamorras Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, un trámite que asume junto al Consistorio de Guadix, ya que ambas ciudades comparten la celebración de Cascamorras desde hace ya quinientos años.

Según la moción que se aprobó por unanimidad de la corporación municipal bastetana, las administraciones locales de ambos municipios deben, a partir de ahora, sumar esfuerzos para mejorar la protección del patrimonio común y para que éste se convierta en un elemento más de desarrollo local, así como de cohesión y atracción turística.

Con estos fines, los ayuntamientos se marcaron una serie de medidas para de "diseñar un plan común de promoción y turismo" que faciliten la aparición de nuevos productos, establecer nuevas formas de aprovechamiento turístico, ofrecer nuevos productos o añadir valor a la experiencia turística de esta fiesta tan singular.

La aprobación en pleno municipal es el primer paso de un proceso dependiente de la Unesco, que es la entidad encargada de la declaración, y que requerirá de los esfuerzos conjuntos de ambas localidades con el objetivo último de proteger una celebración centenaria que mezcla la tradición religiosa y la popular, según informó el Ayuntamiento de Baza en un comunicado.

En la actualidad la Unesco trabaja con las regiones interesadas en la protección del patrimonio inmaterial, que no es otra cosa que "los usos, representaciones, expresiones, conocimientos y técnicas que las comunidades, los grupos y, en algunos casos, los individuos, reconozcan como parte integrante de su patrimonio", tal y como se puede leer en la moción. La mención por parte de la Unesco se sumaría la ya otorgada a nivel nacional como festejo declarado de interés nacional.