Oficialmente, la autopista eléctrica Caparacena-Baza-La Ribina ya es una prioridad para el Gobierno central. El Boletín Oficial del Estado (BOE) publicó ayer el acuerdo del Consejo de Ministros en el que se dio prevalencia a determinadas modificaciones al documento de Planificación Energética-Plan de Desarrollo de la Red de Transporte de Energía Eléctrica 2015-2020, entre ellas las actuaciones referidas al alzamiento de la línea 400 que permitirá el desarrollo industrial del norte de Granada. El acto administrativo más concreto, y que da prioridad a la ejecución de la autopista eléctrica ha consistido en pasar las actuaciones previstas del anexo II, que contemplaba las inversiones más allá del año 2020, al I, cuyo tope de ejecución se sitúa en la frontera de año y medio.

El documento establece el marco para iniciar los trámites para la línea, y además pone fechas, plazos y cifras a las primeras actuaciones que se llevarán a cabo para ejecutar el eje de alta tensión. Más técnicamente, las modificaciones realizadas por el actual Gobierno se han realizado sobre el mismo documento de 2015 que mandaba al último lugar de la cola el proyecto Caparacena-Baza-La Ribina, y justifican los cambios de acuerdo a "razones de eficiencia económica del sistema". Los cambios principales se centran en la creación de un nuevo enlace entre Mallorca y Menorca debido a la aparición de una avería a finales de 2017, un "esfuerzo" para crear infraestructuras de evacuación de electricidad procedente de energías renovables (caso de la línea que atañe a Granada), abastecer la red de ferrocarril (en especial atención al corredor Mediterráneo, y donde jugará un papel esencial la subestación a construir en La Ribina), y en actuaciones para garantizar de forma fiable el suministro.

El Plan también cuenta con realizar una ampliación en la subestación de Íllora

De las 80 actuaciones previstas por el Ministerio para la Transición Energética, cuatro están relacionadas con la línea 400 y dos con otras líneas alternativas con incidencia en la provincia de Granada (ampliaciones de las subestaciones de Íllora -220 kV- y Tabernas -400 kV-). La primera de las intervenciones relatadas en los documentos ministeriales es la construcción de la línea entre Caparacena y Baza y la nueva subestación de la capital del Altiplano norte, para la cual está prevista una inversión de 69 millones de euros a cargo del sistema 2015-2010. La segunda actuación se refiere a la edificación de la subestación de La Ribina y la de entrada-salida de Carril-Litoral, nudo final del eje, para la que está prevista una financiación de 8 millones de euros. El último apartado se refiere al alzamiento de la línea de 400 kilovoltios entre Baza y La Ribina, que requerirá de un gasto de 83 millones de euros. Dentro de las actuaciones previstas hay una ampliación del centro de La Ribina, cuyo coste se presupuestará en un horizonte posterior al año 2020. Sumando todas las cifras anteriores, el Gobierno cifra la inversión total en la autopista de alta tensión en 160 millones de euros, 30 más que los documentos de justificación del proyecto que elaboró la Junta de Andalucía a través de la Consejería de Empleo, Empresa y Comercio en 2017.

Otros datos que se extraen de la documentación publicada por el BOE, y que suponen una actualización de los datos conocidos hasta ahora, es que la línea tendrá un total de 222 kilómetros, 122 entre Caparacena y Baza, y 100 entre esta y La Ribina. En estos momentos, Red Eléctrica se encuentra redactando los proyectos e iniciando los trámites para las concesiones necesarias. Esta semana ya solicitó formalmente la ampliación de la subestación de Caparacena, ente que pertenece al municipio de Atarfe.