"El presidente del Gobierno y yo hemos acordado la materialización de la línea eléctrica Caparacena-Baza para la mejora energética necesaria de Andalucía oriental". Con este tuit de la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, tras la reunión que mantuvo ayer con Pedro Sánchez en La Moncloa se abre la puerta de nuevo para que se reactive el proyecto de al autopista eléctrica que el anterior Gobierno pospuso al nuevo marco de financiación europea que llegará a partir de 2020.

En la última reunión celebrada en Madrid el pasado 23 de abril entre el presidente de la Diputación, José Entrena, y Daniel Navia, secretario de Estado de Energía del Gobierno de Mariano Rajoy, la autopista eléctrica en el Norte de Granada se puso a la cola de todos los proyectos que están a la espera de conocer las inversiones europeas a partir de 2020. "Las directivas europeas establecen ambiciosos objetivos en materia de renovables para la década 2020-2030 y los promotores pueden trabajar ya en promover la tramitación de las líneas que sean necesarias y realistas en dicho horizonte", señaló Daniel Navia al término de la reunión en la sede del Ministerio de Energía y Turismo. En el otro lado de la mesa negociadora, y después de que la infraestructra quedara fuera de los Presupuestos Generales del Estado para 2018, Entrena subrayó que el Gobierno seguía manteniendo la duda de que exista un verdadero músculo empresarial detrás de la misma para poder llevarla a cabo. Y la gran novedad de la reunión es que se avanzó en la posibilidad de dividir el proyecto en dos fases para comenzar con el tramo Caparacena-Baza, "que tiene todos los informes de impacto ambiental que caducan a finales de 2019 y es un tema de preocupación general", señaló José Entrena, que informó de que la Secretaría de Estado tiene que notificarles la inversión mínima de las empresas "que tendría que estar comprometida mediante avales para poder ejecutar la línea". El plan de trabajo que salió de esta reunión era convocar un nuevo encuentro con la Junta de Andalucía y las empresas de energías renovables interesadas en hacer las inversiones "para ver si se consigue ese mínimo" que exige el Gobierno. Ahora, el proyecto tomará un nuevo impulso si se concreta la promesa que Pedro Sánchez formuló ayer a Susana Díaz.