La Guardia Civil ha investigado a una joven de 28 años de edad, residente en Pinos Puente y sin antecedentes policiales, como presunta autora de un delito de apropiación indebida de un teléfono móvil de alta gama. La Benemérita anteriormente había recuperado la terminal sustraída y se la devolvió a su propietaria.

Según explica la Guardia Civil en una nota de prensa, la víctima denunció ante el Instituto Armado la sustracción de su teléfono, valorado en cerca de 1.000 euros, al percatarse de que lo había perdido. En su denuncia, afirma el Cuerpo, afirmó recordar que había estado en un comercio y que la última vez que vio su teléfono fue cuando lo dejó en la caja para pagar.

Entonces, la Guardia Civil abrió una investigación. Primero acudió al establecimiento donde sucedieron los hechos y revisó las imágenes grabadas por las cámaras de seguridad. En ellas comprobó que una de las trabajadoras vio el teléfono móvil en la caja y en lugar de advertir a la propietaria de que lo había olvidado, se quedó con él.

La Guardia Civil ha recuperado el teléfono y se lo ha devuelto a su legítima propietaria, mientras que la mujer que se apropió del mismo pasó a ser investigada por el Instituto Armado.