La contratación por parte de la Entidad Local Autónoma de Carchuna-Calahonda de un servicio propio de recogida de residuos ha generado un "agujero" de 400.000 euros en la empresa de limpieza de Motril, Limdeco, cuya viabilidad se encuentra "en riesgo". Así lo afirmó el alcalde, Carlos Rojas, asegurando que las nóminas de los trabajadores corren peligro de no ser abonadas.

Tras la reunión mantenida ayer con los responsables del Consejo de Administración de la empresa y con técnicos municipales, Rojas aseguró que la decisión de la ELA de adjudicar el servicio de limpieza a una empresa privada y "romper con Limdeco", le está generando a ésta "graves consecuencias" económicas. La medida provocará que la empresa de limpieza deje de ingresar más de 400.000 euros, "lo cual pone en riesgo su viabilidad".

De igual modo, Rojas afirmó que las nóminas de los trabajadores "corren también el riesgo de no poder ser abonadas" debido a este nuevo "agujero". "Para colmo, la nueva empresa se ha negado a absorber a los trabajadores de Limdeco que desarrollaban su tarea en Carchuna y Calahonda, algo que se tiene que hacer por Ley, y la empresa no podrá asumir más personal con 400.000 euros de ingresos menos", añadió el alcalde.