Bernardo, la segunda gran borrasca de la temporada,  ha activado la alerta amarilla por oleaje en la Costa de Granada, donde está previsto que el viento oscile entre los 70 y los 80 kilómetros por hora.

La Costa Tropical vivió la semana otro episodio de fuertes vientos que dejó las primeras consecuencias graves en el mobiliario urbano y las calles. Por ejemplo, la ciudad de Motril vio cómo varios de sus árboles aparecían arrancados por la fuerza extrema del viento en la zona.

En alerta naranja (riesgo importante) por fenómenos costeros están todas las comunidades del área cantábrica: Cantabria, Galicia (Lugo y A Coruña), Asturias y País Vasco (Bizkaia y Gipuzkoa), donde se esperan olas de hasta 6 metros de altura.

En el resto del litoral español, el fuerte oleaje también ha puesto en alerta naranja a las islas baleares de Mallorca y Menorca, donde soplará viento del norte fuerza 8 que dejará olas de 5 metros, además de las provincias catalanas de Girona y Tarragona, con viento norte fuerza 8 y olas de 3 metros.

El viento, que soplará con fuerza en esta borrasca, será intenso en Menorca, donde las rachas de 110 kilómetros por hora han puesto a la isla en alerta naranja, al igual que en Castellón, que registrará rachas de 100 km/h..

La nieve, que se concentrará únicamente en la mitad norte peninsular y siempre en cotas a partir de los mil metros, ha puesto en alerta naranja a León en la cordillera cantábrica, donde se podrán acumular 20 centímetros de nieve en 24 horas.

La Aemet espera que durante la primera mitad de la próxima semana las precipitaciones de Bernardo se restrinjan al norte peninsular y Baleares, y también espera un ascenso de la cota de nieve.

Es probable que durante la segunda mitad de la semana nuevos frentes, más activos y acompañados de una masa de aire más fría, afecten de nuevo a buena parte de la Península y Baleares, advierte la Aemet en su página web.