Un niño mira a través de la ventana vestido con una capa. Una trabajadora con mascarilla y guantes sostiene un ramo de espárragos a la entrada de una cooperativa. Un hombre con protección mira sorprendido mientras conduce una carretilla elevadora. Son algunos de los héroes anónimos de esta crisis que el fotógrafo Alfonso Azaustre ha retratado con su cámara. El profesional de Huétor Tajar ha querido poner cara "a todos los héroes en la sombra de esta localidad, profesionales que siguen trabajando a pesar de el coronavirus para que todo siga funcionando correctamente", explican en una nota de prensa.

Desde hace unas semanas, este vecino de Huetor Tájar acompaña cada día a la policía local durante su recorrido por las calles, y retrata a profesionales como los panaderos, polleros, butaneros, carniceros, trabajadores de la cooperativa de espárragos o cajeros de supermercado. Con esta serie de retratos, que cuelga en su blog www.expedicionesfotograficas.com, Azaustre quiere rendir un homenaje "a todas esas personas que trabajan en la sombra pero que, a pesar de todo, sienten miedo en estos momentos de incertidumbre por la pandemia".

Un niño mira a través de la ventana vestido con una capa de superhéroe.

Una lección de vida 

"Creo que, a pesar de las circunstancias, esta situación está sirviendo para sacar el lado positivo y solidario de muchas personas. La gente es más respetuosa y educada que nunca, y los niños y ancianos están dándonos una verdadera lección de vida", señala el fotógrafo granadino. El concejal de Cultura del ayuntamiento de Huétor Tájar, Francisco Muñoz, destaca "la calidad humana de este fotógrafo hueteño, aunque nacido en Córdoba, como demuestra en esta serie de retratos que le agradecemos enormemente".

Una trabajadora de una cooperativa de espárragos durante el confinamiento.

Un trabajador mira a cámara subido en un torillo.