El Puerto de Motril sigue apostando por recibir cruceros de alto standing, y pretende seguir creciendo en este sentido. En la mañana de ayer atracó en la dársena el Wind Spirit, procedente de Cartagena, como paso previo a un hito que tendrá lugar hoy, cuando por primera vez será "cabecera y cola" de una línea turística de pasajeros. 84 personas llegaron en la nave, en su mayoría belgas y estadounidenses, algunas de las cuales se trasladaron hasta Granada, otras prefirieron quedarse a bordo, y el resto visitaron el centro comercial de Motril, desplazándose con un autobús aportado por el Ayuntamiento y la Asociación de Comerciantes de Motril para fomentar el comercio local.

El Wind Spirit, de 143 metros de eslora, tiene la peculiaridad de ser uno de los pocos cruceros del mundo que se puede impulsar a vela, con el objetivo de ahorrar combustible, y para ello cuenta con cuatro enormes mástiles. El barco pertenece a la naviera Wind Wind, que para este año se ha comprometido a hacer cuatro escalas en Motril.

José Bermúdez, gerente de la sociedad de promoción del Puerto Motrilport, espera que este atraque "sea el principio de una progresión en el número de escalas de cruceros, si bien son cíclicos, pues las navieras hacen un año escala en el Mediterráneo y al siguiente en el Caribe", matizando que "este año toca el Caribe, y tendremos menos". La previsión es de doce para 2007, respecto a la treintena del año pasado. Bermúdez se mostró optimista ante las perspectivas, aunque tampoco quiso "echar campanas al vuelo", destacando que el mercado de los cruceros es "muy complicado". Además, sostuvo que la Autoridad Portuaria "ofrece las instalaciones, mientras que son las autoridades y empresas turísticas las que deben dar a conocer el destino para despertar el interés de las navieras".