La Guardia Civil ha desarticulado cuatro centros de producción de marihuana en viviendas de Albuñuelas, Mecina Bombarón, Las Gabias y Pinos Puente; y se ha incautado de 1.027 plantas de cannabis sativa. En estas cuatro operaciones han sido puestos a disposición judicial once personas como presuntas autoras de un delito contra la salud pública por cultivo y tráfico de sustancias estupefacientes y por un delito leve de defraudación de electricidad.

La primera operación la realizó la Guardia Civil de Pinos del Valle en un domicilio de Albuñuelas, donde los agentes habían descubierto que el detenido, un individuo de treinta años de edad, poseían en su vivienda un centro de producción de marihuana. Los agentes encargados de la investigación solicitaron autorización judicial y registraron la vivienda del sospechoso. Durante el registro encontraron una conexión ilegal a la red eléctrica y una habitación con todo lo necesario para cultivar cannabis sativa, donde crecían 189 plantas en avanzado estado de floración.

La segunda operación tuvo lugar en la localidad alpujarreña de Mecina Bombarón. Los agentes de la Guardia Civil de Cádiar descubrieron una vivienda donde sus propietarios estaban cultivando 331 plantas de cannabis sativa con la ayuda de una conexión ilegal a la red eléctrica. En esta operación uno de los tres detenidos poseía seis escopetas de caza y la Guardia Civil se las ha retirado.

La tercera operación fue explotada por los agentes del Área de Investigación de la Guardia Civil de Las Gabias tras descubrir que cinco personas poseían un centro de producción de marihuana en una vivienda de esta localidad. Los agentes registraron dicha vivienda y descubrieron, como en las operaciones anteriores una conexión ilegal a la red eléctrica y dos habitaciones donde crecían 330 plantas de cannabis sativa en avanzado estado de floración.

Y la última operación contra el cultivo ilegal de cannabis tuvo lugar en un establecimiento comercial de Pinos Puente. La Guardia Civil de esta localidad estaba inspeccionando este comercio cuando un fuerte olor a marihuana procedente de la vivienda anexa al establecimiento puso en evidencia a los propietarios. Los agentes registraron la vivienda y descubrieron 177 plantas de cannabis; mientras que los técnicos de Endesa que cooperaron con la Guardia Civil descubrieron una doble acometida a la red eléctrica.