Viernes Santo en el Campo del Príncipe

Devoción sincera al pie de la cruz de piedra

  • Un centenar de personas se concentra al pie de la cruz de piedra en el Campo del Príncipe mientras en San Cecilio el nuncio y el arzobispo presiden la adoración de las cinco llagas

Devoción sincera al pie de la cruz de piedra

Devoción sincera al pie de la cruz de piedra / D.G (Granada)

Como cada año, sin convocatoria y fiel a la tradición, el pueblo de Granada rezó al pie de la cruz de piedra del Cristo de los Favores, en el Campo del Príncipe. El Viernes Santo volvió a latir como un año cualquiera, con la devoción espontánea en torno a esta imagen. Ramos de flores, silencio y oraciones protagonizaron un emotivo y sincero acto popular al llegar las tres de la tarde.

Con motivo de la pandemia, la parroquia de San Cecilio no rezó el vía crucis en el campo, tampoco La Soledad subió desde Santo Domingo para acompañar en la adoración de la cruz. El arzobispo tampoco acudió a la cita. La tradición buscó ser conciliada con las medidas de control de aforo impuestas por las restricciones sanitarias de la Covid-19.

Los actos religiosos, con el rezo de las catorce estaciones y de las cinco llagas, se celebró en el interior del templo con el espacio aforado y con la presencia de las autoridades religiosas y civiles de la ciudad. Destacó en esta ocasión la participación del nuncio apostólico, Bernadito Auza, quién fue encargado de dirigir el rezo así como de transmitir un saludo del papa Francisco a la ciudad de Granada.

A las tres de la tarde sonaron las campanas de San Cecilio y sonó el cornetín aunque en esta ocasión no fue integrante alguno de la AM Dulce Nombre de Jesús. Y el silencio se hizo en el Campo del Príncipe, los fieles se arrodillaron ante el Cristo de los Favores y se dispersaron una vez lanzaron sus tres deseos, sus tres favores, a esta tricentenaria advocación.

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