Deportes

Ser 'el nueve' de Brasil en el Mundial, lo máximo

  • Luis Fabiano, igualado a goles con Torres y Villa, se afianza como el dueño de la codiciada camiseta número 9 de Brasil.

Igualado con Torres y Villa en el primer lugar de la tabla de goleadores de la Copa Confederaciones, Luis Fabiano se afianza como el dueño de la codiciada camiseta número 9 de Brasil en el Mundial de 2010. Con su doblete sobre Italia, O Fabuloso no sólo cumplió por partida doble su promesa de marcar un tanto como regalo a su hija Giovana, cuyo cumpleaños fue el miércoles, sino que conquistó el trofeo de jugador del partido. "Creo que la de delantero centro es la posición más difícil en la selección. En primer lugar, existe la presión por marcar goles, y además por esa posición han pasado grandes nombres, jugadores que fueron los mejores del mundo. Es un peso grande, pero yo trato de hacer mi parte", afirmó.

Dunga parece satisfecho por el trabajo del ariete del Sevilla, quien suma 20 goles en 28 partidos jugados desde que debutó en la verdeamarelha, en 2003. Pero el propio Dunga advierte que el equipo para el Mundial del próximo año no está definido: "El grupo está abierto", asegura. Para Luis Fabiano, eso significa enfrentar la competencia, no sólo de colegas que están en la Copa Confederaciones, como Nilmar y Pato. También amenazan su posición las aspiraciones de veteranos excluidos del grupo, como el Emperador Adriano y el Fenómeno Ronaldo.

Por esta razón, el hombre del Sevilla apuesta todas sus fichas a convertirse en el artillero de Brasil y en ayudar con goles a que su equipo logre confirmar en Suráfrica el título de la Copa Confederaciones conquistado hace cuatro años, en Alemania: "Seguramente, la Copa Confederaciones es una oportunidad para demostrar que yo realmente puedo ser el delantero de la selección".

Luis Fabiano aún busca alcanzar el auge de su carrera, iniciada hace diez años en el Guaraní de la ciudad de Campinas, donde nació. Tras dos cortas y frustrantes experiencias en Francia, en el Rennes, en 2000 y 2002, regresó a Brasil, donde brilló entre 2002 y mediados de 2004 como un auténtico matador en el Sao Paulo. En 2004 fichó por el Oporto, pero no logró repetir las buenas actuaciones y buscó nuevos aires en el Sevilla, donde sí recuperó su estrella.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios