Movimientos accionariales Sevilla FC

El fin loable de los movimientos

  • Castro reconoce que el grupo que encabeza ha hecho “una compra importante” de acciones en busca de una mayoría cada vez más estable que engrandezca al club.

  • "En vista de que otros accionistas han comprado, nosotros también lo hemos hecho"

José Castro asegura que su grupo ha comprado acciones para tener mayor estabilidad al frente del club.

José Castro asegura que su grupo ha comprado acciones para tener mayor estabilidad al frente del club. / Victor Rodríguez

José Castro, presidente del Sevilla FC, se refirió ayer a la preocupación que existe en el sevillismo respecto a la compra masiva de acciones de la entidad a un precio desorbitado, lo que, según rumores, podría encubrir el deseo de vender un gran paquete a un inversor extranjero que acabase controlando la entidad, sobre todo tras la aparición de sociedades de nueva creación y de origen dudoso denominadas “sociedades opacas” por el colectivo Accionistas Unidos. Esta sociedad atiende al nombre de Sevillistas Unidos 2020 SL, que se ha demostrado que también ha adquirido acciones del Sevilla en este último mes.

El máximo mandatario sevillista aclaró estas cuestiones en la presentación oficial ante los medios de los últimos dos fichajes para la temporada 2018-19, los defensas Sergi Gómez y Joris Gnagnon, que hicieron su puesta de largo en la sala de prensa del estadio Ramón Sánchez-Pizjuán procedentes del Celta y del Stade de Rennes, respectivamente.

“Hay una realidad que no la iniciamos nosotros; hay quien se llevó los datos del club y visita a sevillistas en su domicilio”

“Estoy cansado de repetir siempre lo mismo. Hace meses lo habíamos vendido a unos chinos, luego a unos americanos, el otro día a un nombre, Kraft o algo así (Robert Kraft, dueño de los Patriots de la NFL)… No podemos estar a exprensas de que las redes sociales saque un nombre, de que se diga que el Sevilla se ha vendido. Hay que ser más serios y voy a hablar por última vez de esto. El grupo que nosotros conformamos no ha vendido sus acciones y lo que tenemos es una mayoría estable para hacer al Sevilla más grande”, dijo tajante el presidente del Sevilla.

Gnagnon junto a Sergi Gómez, con Castro y Caparrós. Gnagnon junto a Sergi Gómez, con Castro y Caparrós.

Gnagnon junto a Sergi Gómez, con Castro y Caparrós. / Víctor Rodríguez

Además, Castro acusó veladamente al grupo del ex presidente José María del Nido de iniciar esta carrera por la compra desaforada de acciones en la que, según afirmó, el grupo que él encabeza y que aglutina a las acciones de Rafael Carrión, Francisco Guijarro y Roberto Alés se ha visto obligado a seguir con la misma estrategia. “Hay una realidad que no la hemos comenzado nosotros. Hay quien se llevó del club los datos de registros de acciones y que ha estado visitando a los sevillistas en sus domicilios para comprarles sus acciones. Ante esa estrategia nosotros hemos tenido que empezar a comprar acciones”, continuó el dirigente utrerano, que dio más datos: “En vista de que otros accionistas han comprado acciones, nosotros hemos tenido que comprar también para garantizar la estabilidad de nuestro grupo, que es el grupo mayoritario”.

Paralelamente, en las redes sociales se han extendido las acusaciones hacia el actual consejo y en particular hacia Castro en referencia a que se utilizan las oficinas del club para vender acciones. “La gente vende las acciones libremente, a nadie se le dice que tiene que venderlas. No vamos a buscar a nadie para comprar acciones, pero sí es verdad que la gente viene y hemos hecho una compra importante”, añadió el actual presidente.

“No vamos a buscar a nadie, pero la gente vende libremente, viene aquí y hemos hecho una compra importante”

Este diario desveló en su edición del pasado lunes que la sociedad Sevillistas Unidos 2020 SL, calificada por la Federación de Peñas y la asociación de pequeños accionistas Accionistas Unidos como sociedad “opaca” ha comprado títulos a individuales a 1.600 euros por acción. Este grupo ha mandado al Consejo Superior de Deportes (CSD) una petición para que actúe “de oficio” ante la preocupación general por los movimientos accionariales.

Este asunto no parará aquí y tendrá su punto de mayor crispación en la próxima Junta General de Accionistas, para la que aún quedan cuatro meses largos.

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