Francisco Javier Vicente Navarro Javi Navarro, reconocido por el sevillismo como el Gran Capitán que levantó las cinco copas conseguidas por su equipo en los últimos tiempos, anunció este martes 19 de mayo su retirada después de no superar una lesión en la rodilla derecha que le ha tenido de baja dos temporadas.

El central valenciano, que cumplió el pasado febrero 35 años, disputó su último partido el 23 de junio de 2007 y fue la final de la Copa del Rey que el Sevilla le ganó al Getafe por 1-0 en el estadio Santiago Bernabéu.

Ese trofeo fue el cuarto que levantó el capitán, ya que antes había alzado dos copas de la UEFA, en Eindhoven (Holanda) y Glasgow (Reino Unido), y una Supercopa de Europa en Mónaco.

Después, ya lesionado, en el verano de 2007, también como capitán de la plantilla fue el encargado de recoger el trofeo de campeón de la Supercopa de España que le disputó al Real Madrid, al que le ganó en el Bernabéu por 3-5.

Javi Navarro, que cumplía contrato este próximo junio tras ocho temporadas en el Sevilla, ha luchado dos campañas para volver al nivel que le hizo indiscutible en el centro de la defensa, pero nunca se ha sentido ya capaz de regresar a un equipo con las exigencias que tiene ahora el hispalense.

El defensa, quien antes de su etapa sevillista había superado otra grave lesión, en la rodilla izquierda, que casi le retira del fútbol, en esta ocasión lo ha vuelto intentar, pero en diciembre de 2007 decidió, al ver que la evolución no era la correcta, someterse a una artroscopia en la clínica del doctor Cugat, en Barcelona, operación que ya le hizo pasar en blanco la pasada temporada.

El capitán no ha parado de trabajar duro en los gimnasios y con los médicos y fisioterapeutas, pero no ha tenido el éxito que esperaba y ahora, después de otra temporada completa de baja, ha decidido no intentarlo más.

Javi Navarro, cuatro veces internacional absoluto y con 224 partidos en Primera, se inició en el Valencia, con el que debutó en la máxima categoría el 6 de abril de 1994 en San Sebastián ante la Real Sociedad (0-0) y con el que estuvo cinco campañas.

También jugó en Primera con el CD Logroñés (1994-95), en Segunda B con el Valencia B (1999-00), filial en el que inició la recuperación de su primera lesión de rodilla, y en Segunda A con el Elche (2000-01), del que pasó a un Sevilla que retornaba a Primera de la mano de Joaquín Caparrós.

El defensa valenciano, además de reconocido por ser el capitán de un poderoso Sevilla, siempre tuvo la fama de jugador duro, contundente y temido por los delanteros.

En abril de 2005 esa fama se acrecentó al ser objeto de duras críticas tras un violento choque con el centrocampista venezolano Juan Arango en un partido de Liga que jugó el Sevilla en el entonces estadio Son Moix ante el Mallorca.

Javi Navarro impactó con el futbolista suramericano en el centro del campo y Arango cayó desplomado con un traumatismo cráneo encefálico, además de la fractura del malar y el estallido del labio.

El venezolano permaneció tres días en una clínica recuperándose del golpe y volvió a los entrenamientos un mes después, algo que le costó al capitán sevillista una fuerte sanción por parte del Comité de Competición.

A Javi Navarro le ha costado quitarse el sambenito de defensa duro y violento, pero sus entrenadores en el Sevilla, Joaquín Caparrós y, posteriormente, Juande Ramos, siempre confiaron en él e incluso Luis Aragonés le llamó para algunos partidos de la selección absoluta, en la que debutó con 32 años.

Ser internacional en la fase final de su carrera, unido a los éxitos con su equipo de adopción, hará que el sevillismo siempre tenga en su memoria al Gran Capitán.