Los diputados del PP han cerrado filas en torno a la reforma de la ley del aborto impulsada por el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, y han rechazado la proposición no de ley del PSOE que pedía la retirada "inmediata" del texto y no continuar con su tramitación. La iniciativa, cuya votación ha sido secreta a petición de los socialistas y se ha realizado en una urna, no ha sido aprobada por 183 votos en contra, 151 a favor y 6 abstenciones. Aunque la votación ha sido secreta, algún diputado del grupo popular podría haber roto la disciplina de voto, ya que en otra previa votaron 178 parlamentarios del PP que, sumados a los seis apoyos anunciados por Unió y el voto de UPN, resultarían 185 frente a los 183 obtenidos.

Al término del Pleno, Gallardón ha afirmado en los pasillos del Congreso que hay que acatar la voluntad de la mayoría. "Entiendo el resultado como expresión de la voluntad popular, creo que la soberanía nacional, como todo el mundo sabe, reside en el pueblo español y está representado en esta Cámara", ha subrayado. La vicesecretaria general del PSOE, Elena Valenciano, quien ha defendido la iniciativa de no continuar con la tramitación del anteproyecto, se ha limitado a comentar a la salida sobre el resultado adverso para su grupo: "lo sabíamos, estábamos casi seguros". La vicepresidenta primera de la Mesa del Congreso, Celia Villalobos -que en el pasado ha mantenido opiniones diferentes a la del PP sobre el aborto-, al ser preguntada por los periodistas si el resultado suponía un respaldo a la reforma, ha contestado: "no, será un rechazo al PSOE, que no es lo mismo, punto y no vayáis más lejos porque eso es lo que hay".

Durante el debate parlamentario, Valenciano ha advertido a los diputados del PP que si tenían algún problema "con el ala dura de su partido" y por eso llevaban a cabo esta reforma, "las mujeres no deben ser moneda de cambio". "Nadie sabe por qué el Gobierno se ha metido en esta reforma", ha subrayado Valenciano, además de manifestar que sólo el ultraderechista Jean Marie Le Pen la apoya. A su juicio, se trata de una ley que cercenará la libertad de las mujeres y provocará que España pase a formar parte de los pocos países europeos que limitan o prohíben la libertad de la mujer para decidir ser madre. Por el contrario, la diputada del PP Marta Torrado ha calificado de "intolerables" a los socialistas por intentar retirar sin debate parlamentario el Anteproyecto de Ley de Protección de la Vida del Concebido y de los Derechos de la Mujer Embarazada.

Torrado ha subrayado al PSOE que hay muchas mujeres que no piensan como este partido y que no por ello son "menos modernas" ni están "menos formadas". Los grupos de la oposición que han tomado la palabra han mostrado su oposición al anteproyecto y su apoyo a la iniciativa socialista -Izquierda Plural, PNV, UPyD, Esquerra Republicana, BNG, Amaiur-, mientras que Unió, de CiU, ha dicho estar en contra del texto del PSOE.

La diputada de Amaiur Onintza Embeita ha llegado a mostrar su rechazo al anteproyecto afirmando: "En mi coño y en mi moño mando yo y solamente yo". Al término de la sesión, algunas diputados del PSOE, entre ellos Ángeles Vázquez, se han dirigido a los del PP exclamando: ¡qué vergüenza!" por el cierre de filas. El portavoz parlamentario de los populares, Alfonso Alonso, ya había garantizado por la mañana que su grupo no se iba a "romper" ni a "quebrar" en la votación secreta.

En esta jornada, el PSOE ha enviado una queja al presidente del Congreso, Jesús Posada, porque, según este grupo, se ha impedido la entrada a la tribuna de la secretaria de Igualdad, Purificación Causapié. La reforma de la ley del aborto también ha sido protagonista en el Senado, donde Gallardón ha destacado que el anteproyecto defiende los derechos de la mujer, si bien, ha asegurado que ningún derecho es absoluto, ya que también se deben proteger los del no nacido.

Ha preguntado al senador de la Entesa Joan Saura, quien le ha pedido que retire la reforma, que si está tan convencido de tener argumentos para oponerse a ella por qué se niega a debatirla; "¿por qué tiene miedo al debate?". Además, el ministro ha dicho al senador que, en su lugar, "estaría preocupado" de que "la señora Le Pen" le acompañe en la defensa de sus argumentos: "es algo que me crearía cierta preocupación", ha ironizado.