Las agresiones comenzaron cuando la menor de una familia de Lugo tenía 7 años. Empezaron con unos tocamientos para después agravarse hasta tener relaciones sexuales con penetración y sin consentimiento hasta dejarla embarazada cuando la menor tenía 13 años.

Tras lo sucedido obligaron a la pequeña a tener al bebé y a darlo en adopción. Ha sido cuando la víctima ha tenido 16 años cuando ha logrado salir del domicilio y denunciar los hechos.

Sus agresores fueron su hermana mayor, la pareja de ésta, y el hermano de él. Al parecer fue dicha hermana la que convenció a los otros dos agresores para que consumaran el delito.

La semana del 16 de enero los tres acusados se sentaron en el banquillo y reconocieron los hechos. Según ha recogido la Fiscalía, ninguno de los miembros de la familia se había percatado de lo que estaba sucediendo.

“En el contexto de la convivencia familiar, su hermana y su cuñado consiguieron doblegar a la pequeña para que mantuviese relaciones sexuales con él”, indicó el fiscal del caso en su escrito de acusación, en el que subrayó que era la hermana mayor la que propiciaba estos encuentros “dejando a la pequeña en una situación de desprotección total”.

La acusación ha recalcado que las agresiones tenían lugar de forma habitual y siempre en el mismo lugar: la casa familiar. A esto, por tanto, se suma el agravante de que la menor no podía escapar de la situación.

En un principio el Ministerio Fiscal pedía para ellos una condena de 11 años, pero finalmente esta quedó rebajada a tres después de que aceptaran un acuerdo con el organismo público y con la acusación particular del caso.

Además, uno de los chicos tendrá que indemnizar a la víctima con 20.000 euros y los otros con 14.000. La Audiencia Provincial de Lugo deberá ratificar la sentencia para poner cierre a este caso.

Indignación en Lugo

Los vecinos y vecinas de la localidad se reunieron en la mañana del 2 de febrero frente a la sede de la Audiencia Provincial de Lugo para pedir que se revisara la condena y se hiciera justicia por la víctima.

Afirman que tienen miedo porque saben que en muy poco tiempo estas personas saldrán de prisión y podrán regresar al pueblo. Además de miedo, la sentencia ha generado estupefacción tras el acuerdo alcanzado entre las partes.

Los motivos para esta rebaja se encuentran en la lentitud con la que se ha investigado el caso. Esto ha llevado a una «dilación indebida» de la que los acusados no son responsables. Además, también se les ha rebajado la pena porque los acusados han reconocido los hechos y porque previamente habían depositado una cantidad de dinero, 50.000 euros, como adelanto de la indemnización a la que, presumiblemente serían condenados.

También ha despertado el enfado entre colectivos feministas que califican de «irrisoria» la sentencia. A juicio de la portavoz de la plataforma feminista de Lugo, Ana Torrón, ha fallado «el círculo» personal de la niña, «el resto» de la familia y el colegio. «Todo falla si nadie es capaz de detectar lo que se le está haciendo a una niña de siete años que a los trece se quedó embarazada», aseguró ante los medios de comunicación.