El sector turístico español ha visto entorpecida su leve recuperación de la crisis, que se observa en los primeros meses de 2010, por el reciente caos aéreo en Europa, que ha vuelto a sembrar el horizonte del turismo de más oscuros cuando ya se abrían algunos claros, según Exceltur.

En una rueda de prensa de presentación de los resultados del sector del primer trimestre del año, el vicepresidente ejecutivo de la Alianza para la excelencia turística Exceltur, José Luis Zoreda, dijo que la nube de ceniza procedente del volcán islandés Eyjafjalla han sido "un muy duro golpe para el turismo en un momento en el que empezaba a repuntar".

Las pérdidas del sector turístico español, excluyendo a las aerolíneas, acumuladas en estos seis días de restricciones del tráfico aéreo alcanzan los 252 millones de euros, dejando de ingresar 42 millones diarios.

Para sus previsiones Exceltur toma como referencia el promedio de llegadas en avión a España de turistas extranjeros en abril de años anteriores y a partir de ahí ha elaborado un cálculo hipotético, compensando una parte de los ingresos que se dejan de percibir por parte de los turistas que no llegan con los gastos que tiene que afrontar los extranjeros varados en el país.

En opinión de Zoreda, estas pérdidas imprevistas producidas por el volcán "trastocarán a la baja" los resultados de las empresas turísticas en el segundo trimestre de 2010 y habrá un nuevo decrecimiento del PIB turístico en España del 0,9% en todo el ejercicio.

Ante esta situación, una vez se normalicen los vuelos y se detallen las pérdidas, el turismo pedirá un plan de medidas de apoyo específico, prioritario y proporcional al que la UE se plantea para las compañías aéreas, y propondrá al Gobierno que aplace la entrada en vigor de la subida del IVA, prevista para el próximo mes de julio.

Zoreda advirtió de que esa subida puede provocar una anticipación de compras y viajes que suponga una mayor dinamización en el segundo trimestre y una nueva ralentización en los meses de verano.

Zoreda calificó de muy oportuna la respuesta dada al caos aéreo europeo por el ministro de Fomento, José Blanco, al ofrecer los aeropuertos españoles como hubs (centros) de redistribución de pasajeros en Europa, con lo que gana adeptos para luchar por la política del cielo único europeo cuya necesidad se ha acentuado aún más con esta crisis provocada por el volcán.