La presidenta de la Diputación de Cádiz, Irene García.

Cádiz es una de las grandes referencias el turismo en España. Cádiz es la tierra vinculada al mar, beneficiada de la llegada de decenas de cruceros anualmente, con unos poderosos astilleros que aspiramos a que incrementen sus cargas de trabajo. Cádiz es industria aeronáutica. Y Cádiz es campo.

Tanta es la potencia del sector primario que lo consideramos esencial desde muchos puntos de vista. En los últimos años, empero, ha cobrado una especial relevancia el gastroturismo. Las decenas de miles de visitantes que la provincia recibe durante todo el año, especialmente en los meses estivales, disfrutan de nuestro clima, de nuestras playas, de nuestra sierra… y también de nuestra cocina. Y en cualquier restaurante, en cualquier bar, oímos reclamar atún, productos de nuestras riquísimas huertas, nuestros embutidos, nuestros vinos, nuestros quesos o nuestros aceites.

La apuesta de la Diputación de Cádiz es firme desde hace años por nuestro sector primario. La divulgación, en este sentido, es fundamental, lo que ha comportado que varias de nuestras poblaciones celebren ferias (que estamos deseosos de recuperar, en cuanto las normas sanitarias nos lo permitan), con el respaldo y la colaboración de esta Diputación. De ese modo, se promocionan el aceite, en Setenil y en Olvera; quesos artesanos de la Sierra y otras comarcas; las gallinas autóctonas en La Barca; el conejo y la caza menor, en Paterna; la miel, en Prado del Rey; el espárrago en Alcalá del Valle; el langostino, en Sanlúcar; el pescado de estero en El Puerto, San Fernando, Chiclana y Puerto Real, la carne de retinto…

Tanta es la potencia del sector que del 21 al 24 de octubre vamos a celebrar, con carácter nacional, la primera edición de una Feria Agroalimentaria de la provincia en el espacio expositivo de Ifeca, en Jerez. Exhibiremos la enorme oferta de Cádiz, un lugar de encuentro donde promocionaremos el gran potencial del sector. Tendremos apartados para la formación; para encuentros empresariales; para los nuevos modelos de marketing del sector; para analizar en foros especializados el presente y el futuro; para la cada vez más estrecha vinculación entre la gastronomía y el turismo, para, por supuesto, deleitarnos con demostraciones en directo de algunos de los mejores cocineros de nuestra provincia…

En estos duros tiempos que nos toca vivir, los agricultores y ganadores (además de otros sectores, profesionales, por supuesto) han seguido con sus labores. Desde Diputación hemos colaborado con las asociaciones agrarias y ganaderas, puesto que entendemos que sus cometidos profesiones son fundamentales para la economía de la provincia y para evitar la despoblación. Es por ello esencial incorporar a las nuevas generaciones a este sector

Tenemos retos por delante. El futuro del sector primario pasa por la sostenibilidad, la tecnología y la internalización. Pasa por reconocer, nosotros los primeros, la enorme calidad de los productos. Y pasa por trasladar a las nuevas generaciones la relevancia de estos cometidos, para que puedan dedicarse a ellos, conservando nuestras tradiciones, nuestros recursos económicos. No me cabe duda que teniendo una materia prima de esta calidad, la provincia de Cádiz sabrá superar estos retos.