Ucrania era segunda para las casas de apuestas en el Festival de Eurovisión, pero su representante, Alina Pash, se ha quedado fuera por un suceso bien ajeno a la música. En un país donde el conflicto fronterizo con Rusia adquiere dimensión internacional, la rapera eurovisiva se ha visto obligada a renunciar por un visado falsificado de una visita que hizo a la península de Crimea en 2015. Este territorio ucraniano fue anexionado ilegalmente por Rusia.

"No quiero estar más en esta sucia historia. Con gran pesar retiro mi candidatura como representante de Ucrania  en Eurovisión. Lo siento mucho", anunciaba Pash. Pese a ser una renuncia realmente ha sido forzada por las autoridades. Se ha comprobado para responsables de fronteras que viajó ilegalmente a Crimea y presentó un documento falso de aquel viaje para una actuación. Se entiende así que esta cantante es simpatizante de Rusia.

Una web local Mirotvorets, se encarga de elaborar una 'lista negra' de ucranianos afines a Rusia. "Soy ciudadana de Ucrania, cumplo las leyes de Ucrania, trato de transmitir las tradiciones y los valores de Ucrania  al mundo", insiste Pash, que se ha visto agotado y acorralada por esta situación desde que su nombre, el pasado día 12 se anunció como la representante del país en Turín 2022.

🇺🇦 Alina Pash ha cerrado la gala del #Vidbir2022 con su emotiva interpretación de “Tini zabutykh predkiv”. ¿Conseguirá el billete a Turín? 🎶 pic.twitter.com/fifYEoOVzX

— ESCplus España 🇪🇸 | Noticias de Eurovisión (@escplus_es) February 12, 2022

Su canción elegida, con notas étnicas entrelazadas con hip hop y  pop se titulaba Sombras de los ancestros olvidados. El servicio de inmigración de Ucrania alertó entonces de lo que ellos consideraban una situación irregular de la cantante.