Por fin ha llegado el día de disfrutar de la creación de uno de los fichajes de Netflix más sonados en los últimos tiempos. Hacía muchos años que Matt Groening, creador de éxitos como Los Simpson y Futurama, no se ponía al frente de una serie de televisión. Cuando la plataforma le propuso que creara una ficción no lo dudó. Sacó su lado feminista y surgió (Des)encanto, una serie de animación para adultos protagonizada por la princesa rebelde Bean. En palabras de Matt, "la serie trata sobre la vida y la muerte, el amor y el sexo, y cómo seguir riendo en un mundo lleno de sufrimiento e idiotas, a pesar de lo que los ancianos, magos y otros idiotas te dicen". Si algo destaca de este proyecto es que el personaje principal es una mujer, una princesa que tiene problemas con el alcohol, algo que enfurece mucho al rey. Pero Bean no está sola, siempre va acompañada por sus dos grandes y peculiares amigos, un elfo y un demonio. Los tres viven en un reino de fantasía en el que vivirán locas aventuras. Una gamberrada más de Groening que ha creado mucha expectación en redes sociales. Antes de su estreno la cuenta oficial de Twitter de la serie ya contaba con más de veinticinco mil seguidores, un número que desde hoy seguro que aumenta de forma considerable.

La protagonista de la historia, Bean, es una princesa de lo más rebelde.

En cuanto al proceso de creación Groening ha contado en una entrevista a The New York Times que lleva "treinta años haciendo animación semanal, secuencial y pensada para un horario específico. Al tener de repente todos estos episodios que son lanzados al mismo tiempo se vuelve necesario contar una gran historia. Y eso ha sido muy divertido. También muy tortuoso". En cuanto a los que comparan la serie con Juego de Tronos o El Señor de los Anillos por sus tintes épicos y medievales, el autor ha asegurado lo siguiente: "Esta es mi sugerencia para Hollywood: puedes decir: Es como Los Simpson mezclado con lo que sea o Es lo que sea mezclado con Juego de Tronos y lo van a aceptar".

La primera temporada de (Des)encanto está compuesta por diez episodios de aproximadamente media hora de duración cada uno que se caracterizan por su buen ritmo y el humor constante. Cada capítulo tiene una trama cerrada pero también cuenta con elementos que vuelven a salir a la luz conforme la historia avanza. Tanto confía la plataforma en este genio de la ficción animada que antes de lanzar esta tanda de episodios Netflix y Groening ya tienen firmada una segunda temporada de la misma cantidad de capítulos. El gran logro de esta obra de Groening es el mismo que ya consiguió con Futurama. Dentro de que todas sus series guardan su sello y tan solo con ver a los personajes se sabe quién está detrás, él sabe diferenciar cada una de sus creaciones de Los Simpson. Todo ello con la maestría con la que une el sentido del humor con las emociones reales de los personajes, con los que los espectadores se sienten muy identificados.